12 de diciembre de 2014

Hombres, mujeres & niños (Jason Reitman, 2014)

Tras la interesante Una vida en tres días, llega a las carteleras españolas la nueva cinta del joven director Jason Reitman.
Basándose en la novela homónima escrita por Chad Kultgen, el propio Reitman, junto a Erin Cressida Wilson (Chloe, Retrato de una obsesión), han construido un guión que explora, y critica con bastante buen tino, como los móviles, los video-juegos o Internet han llegado a influir tanto en la sociedad actual como para transformar por completo las relaciones interpersonales de cualquier ámbito social, incluidas las familiares.
Hombres, mujeres & niños es una película coral donde veremos como un grupo de adolescentes y sus padres van entrelazando varias historias a lo largo de sus dos entretenidas horas de metraje.
Reitman ha contado con un reparto intergeneracional, donde encontramos actores de todo tipo, desde los conocidísimos rostros de Adam Sandler o Jennifer Garner, o actores más indys como Rosemarie DeWitt o J. K. Simmons, hasta actores como Dean Norris o Judy Greer, provenientes de las series de televisión, y donde todos ellos han sabido sacar lo mejor de sí mismos. Sorprende bastante ver la soltura con la que se desenvuelve en un papel dramático un actor como Adam Sandler, al que el cómico sabe dotar de pequeños golpes de humor negro que nos ratifican lo buen actor que es, como ya demostrara en Embriagado de amor.
Un reparto veterano y solvente que arropa a un grupo de actores adolescentes como Olivia Crocicchia, Kaitlyn Dever o Ansel Elgort, que se descubren como los verdaderos protagonistas de la cinta.
Con la dependencia de la sociedad actual a las nuevas tecnologías de fondo, veremos como los personajes de Reitman abordan temas como la infidelidad de un matrimonio que ha perdido la pasión, la sobreprotección de una madre, la anorexia de una joven adolescente, la búsqueda desesperada de la fama a través de la red, el amor adolescente, o como la sobre saturación de estímulos procedentes de Internet han llegado a deformar el erotismo.
En el aspecto visual, cabe destacar como el espectador puede ver en pantalla, al mismo tiempo que ve como reaccionan los actores, lo que los personajes están viendo en las pantallas de sus ordenador o de sus smartphones ya que está perfectamente integrado en la imagen, y en mi opinión es uno de los aciertos de la cinta, al optar el director por esta opción y no por los clásicos plano-contraplano.
En definitiva, una propuesta la mar de interesante de un director joven como Jason Reitman, con muchas historias aún por contar, y con una filmografía de lo más ecléctica, que en cada nuevo proyecto que acomete intenta cambiar de registro todo lo posible, con respecto a sus anteriores filmes.
Si os gustaron sus anteriores películas, no puedo dejar de recomendaros este nuevo trabajo del director de Juno o Up in the air.

1 de diciembre de 2014

Los pingüinos de Madagascar: La película (Eric Darnell, Simon J. Smith, 2014)

El pasado viernes, aprovechando el comienzo del mes de Diciembre y sus inminentes fiestas navideñas y con la vista en captar al espectador infantil que tendrá mucho más tiempo libre, llegó a las carteleras españolas Los Pingüinos de Madagascar: La película.
Quién no conoce ya a estos alocados y cucos pingüinos, que han ido apareciendo como personajes secundarios durante la, hasta el momento, trilogía Madagascar, que han llegado a protagonizar su propia serie de televisión, y que ahora finalmente han dado por fin el salto a la gran pantalla como protagonistas absolutos.
En esta nueva aventura de los Pingüinos, viajaremos al pasado y seremos testigos de como Capitán, Kowalski, Rico y Soldado se conocieron y llegaron a formar un comando de pingüinos especializados con grandes misiones que realizar en el futuro.
Para aquellos que disfrutaron con el humor alocado y sin complejos de Madagascar 3: De Marcha Por Europa, la anterior producción de la saga que nos trajo Dreamworks, tienen una nueva oportunidad en este film de reencontrarse con ese mismo tipo de humor gamberro e irreverente, donde los gags y los chistes se van sucediendo en la pantalla a un ritmo vertiginoso y donde el espectador no dejará de reír en ningún momento durante la hora y media de aventura non-stop.
La cinta es todo un festival del humor, donde los gags son lo realmente importante y el argumento es lo de menos, y donde sus guionistas han apostado por dar a su historia un aire a película de espías a lo James Bond, con organizaciones secretas, científicos locos y rayos maléficos que hará las delicias de los amantes de este tipo de historias.
Si tenéis la suerte de poder ver la película en su versión original, descubriréis que actores tan conocidos como Benedict Cumberbatch, Ken Jeong, Peter Stormare o John Malkovich, han prestado sus voces para dar vida a los personajes que conforman la organización de animales polares llamada Viento del Norte y a Dave, el malvado científico cuyo maléfico plan es vengarse de todos los pingüinos del planeta.
En definitiva, si os gustaron las tres películas de Madagascar, y os gusta pasároslo realmente bien con una entretenida y divertida película de animación, ya no tenéis excusa para no acudir al cine, ya sea solos o con toda la familia, y disfrutar con esta gran comedia que, por lo que parece, ha funcionado realmente bien en taquilla en su primer fin de semana de proyección. Y nosotros que nos alegramos.

23 de octubre de 2014

Vamos de polis (Luke Greenfield, 2014)

Mañana viernes llega a las carteleras españolas Vamos de polis, una nueva cinta dirigida por Luke Greenfield, realizador conocido por ser el responsable de comedias tan dispares como Estoy hecho un animal o La vecina de al lado.
La historia de esta comedia de acción, está escrita por Greenfield junto a Nicholas Thomas, y nos presenta a Ryan y Justin, dos auténticos fracasados que decidieron mudarse desde su Ohio natal a Los Angeles en busca del triunfo, pero que por varias razones no han llegado a nada en la vida. Mientras que Ryan está desempleado y sin ningún tipo de aspiración en la vida, Justin es ninguneado continuamente en su trabajo como diseñador de videojuegos. Todo cambiará en sus vidas cuando decidan aisistir a una fiesta de ex-alumnos disfrazados de agentes de policía, y descubran de manera fortuita el poder y el respeto que consiguen cuando visten los uniformes. Ambos descubrirán que lo que se inició como una broma inocente puede acarrear serias consecuencias e incluso situaciones de verdadero peligro.
Vamos de polis presenta una idea muy interesante, que podría haber planteado situaciones realmente divertidas, pero en este caso, y debido a un guión no demasiado inspirado, la cinta solo logra arrancar alguna que otra sonrisa al espectador, y lamentablemente no llega a ser una gran comedia, aunque si tiene momentos bastante divertidos, que solo podremos ver durante los créditos ya que parecen haber sido descartados del montaje y que hubiesen quedado genial insertados durante la película con algún montaje musical.
Puede que el problema sea que algunos gags están alargados en exceso o que los actores protagonistas, Jake Johnson y Damon Wayans Jr. no aciertan en mostrarnos la vis cómica que se les presupone, y que han demostrado con creces en la exitosa serie New Girl, junto a Zooey Deschanel, y donde suelen estar bastante divertidos.
Acompañando a la pareja protagonista nos encontramos con el siempre cumplidor Rob Riggle, que no se pierde una comedia, con la guapa Nina Dobrev, con el siempre interesante James D'Arcy y el veterano Andy Garcia.
También los amantes de la acción desenfrenada disfrutarán con Vamos de polis, ya que en su tramo final, la película se adentra en el siempre entretenido terreno de las buddy movies, y es durante esos momentos donde el director, gracias a un acertado montaje, muestra algo más de chispa que en el resto de la cinta usando algún que recurso narrativo que seguramente llame la atención del espectador.

7 de octubre de 2014

Perdida (David Fincher, 2014)

El próximo viernes 10 de Octubre llega a las pantallas españolas la esperada última cinta de David Fincher, director de películas tan prestigiosas y reconocidas como Zodiac, El club de la lucha o La red social, por citar solo algunas.
Perdida (Gone Girl) está basada en la novela superventas de Gillian Flynn, y llega acompañada por una interesante campaña mediática que consistió en mostrar algunos de los vídeos con los que el personaje de Nick Dunne, interpretado por Ben Affleck, pedía ayuda a sus vecinos para encontrar a Amy, su esposa desaparecida, interpretada magistralmente por Rosamund Pike.
Narrada con un ritmo ágil y frenético, y repleta de giros argumentales que descolocarán al espectador en todo momento, Perdida nos cuenta como la desaparición de Amy, y su posterior investigación, nos va revelando la historia de su relación desde el momento en el que se conocieron hasta el momento de la desaparición de Amy, que coincide con el día en el que el matrimonio celebraba  sus cinco años de casados.
El circo mediático que va creciendo exponencialmente según se va desarrollando el caso, hará pensar a la opinión pública que Nick podría haber asesinado a su esposa, y todos los detalles relacionados con el caso apuntan a que podría ser cierto.
A medio camino entre un thriller de suspense, y una comedia negra, Fincher mueve a unos personajes brillantemente caracterizados que aparentan ser un matrimonio feliz de cara a la pequeña ciudad en la que viven, pero que según va avanzando la trama y debido a la vorágine mediática en la que se ven inmersos, veremos como la aparente felicidad de un matrimonio puede esconder más de un secreto.
Rosamund Pike interpreta a Amy, una esposa abnegada que renunció a su vida en Nueva York, y a la fama y atención mediática cosechadas por la exitosa serie de novelas de la Maravillosa Amy, basadas en su propia vida y escritas por sus padres, en el momento en el que su marido Nick tuvo que trasladarse a su pueblo natal para cuidar de su madre enferma. Nick, por su parte es un escritor que dejó de escribir y que ahora se dedica a dar clases en el instituto.
Fincher nos sirve una entretenida y enrevesada trama, que mantendrá al espectador interesado en todo momento de las más de dos horas que dura la cinta, gracias al guión escrito por Gillian Flynn, autora también de la novela. Gracias a unos grandes diálogos todos los actores tienen momentos geniales, brillando especialmente Affleck y Pike, que están soberbios, y sin olvidar al resto del reparto en los que encontramos nombres tan conocidos como Neil Patrick Harris, Carrie Coon, Kim Deckins o Tyler Perry, que arropan perfectamente a la pareja protagonista.
Tanto Flynn como Fincher ponen toda la carne en el asador en esta inclasificable película, y no dejan títere con cabeza al criticar afiladamente, y de manera bastante sutil, muchos de los problemas que acucian a la sociedad moderna en la que vivimos, en la que en muchas ocasiones las apariencias pueden llegar a engañarnos.
Mención especial merece la banda sonora magistralmente ejecutada por Trent Reznor y Atticus Ross, colaboradores habituales de Fincher, a los que aparentemente no se les reconoce durante toda la película, pero si que saben hacerse notar en ciertos momentos claves del filme.
Como curiosidad cabe señalar que una de las productoras de la película es la actriz Reese Witherspoon, un detalle que no tiene mayor importancia, pero que a mi personalmente me pareció bastante curioso como para indicarlo en esta reseña.
Si has conseguido leer hasta aquí y te consideras fan del director de Seven, solo me queda darte la enhorabuena por la maravillosa película que vas a tener la suerte de disfrutar, que a mi parecer es uno de los trabajos más solidos y equilibrados del director hasta la fecha.

18 de septiembre de 2014

El Corredor del Laberinto (Wes Ball, 2014)

Antes de empezar a comentar El Corredor del Laberinto (The Maze Runner) quiero confesar mi total y absoluto desconocimiento de cualquier saga o sagas de novelas juveniles que, en los últimos años, están siendo adaptadas por los grandes estudios de Hollywood a raíz del éxito cosechado, primero por las novelas, y posteriormente por las varias adaptaciones cinematográficas de Harry Potter, y de otros títulos con temática similar dirigidas al mismo target como puedan ser Crepúsculo o  Los Juegos del Hambre. Ni he leído las novelas de todas estas franquicias literarias, ni planeo leerlas en un futuro inmediato, y en cuanto a las películas si que he podido ver alguna que otra, pero ninguna ha llegado a satisfacerme del todo.
Basada en una serie de novelas de corte juvenil, escritas por James Dashner, la historia de El Corredor del Laberinto, título de la primera novela de la trilogía, nos presenta a Thomas, interpretado por el joven Dylan O’Brian (Los Becarios, Teen Wolf), un muchacho con amnesia que de repente aparece en un claro de un valle en el que un numeroso grupo de muchachos, que se denominan a sí mismos clarianos, han creado una sociedad en la que cada uno tiene encomendada realizar una labor específica. Liderados por Alby, el primer chico que apareció en el claro hace tres años, el número de clarianos ha ido creciendo a razón de un muchacho por mes, sin saber ninguno de ellos de donde vienen, o como han llegado hasta ese claro, que está completamente rodeado por un gigantesco laberinto que va cambiando su configuración cada cierto tiempo, y que para colmo está custodiado por unas extrañas y mortíferas criaturas a las que llaman Laceradores. Con el objetivo de encontrar una salida a través del laberinto, un reducido número de muchachos llamados Corredores, investigan y memorizan cada rincón del mismo con la esperanza de encontrar la salida algún día, mientras intentan esquivar a los mortíferos Laceradores.
Thomas comenzará a tener una serie de misteriosas visiones relacionadas con una organización conocida como C.R.U.E.L., que le llevará, junto a algunos de sus compañeros, a hacerse preguntas sobre el origen del laberinto. A los pocos días, la inesperada llegada al claro de una joven llamada Teresa, desencadenará una serie de acontecimientos que, lógicamente, no voy a desvelar para no entrar en el terreno de los spoilers, y no destripar más aún la trama.
El elenco, repleto de jóvenes rostros del cine y la televisión, algunos un poco más conocidos que otros, cumple de manera efectiva, pero sin alardes, que ya es decir bastante cuando se trata de jóvenes actores, con poca experiencia a sus espaldas.
A pesar de ser su primera película, y contar con apenas un par de cortometrajes en su haber, Wes Ball no se maneja mal con la cámara y se nos descubre como un director bastante competente en las escenas de acción, capaz además de mantener el suspense y el interés del espectador a lo largo de las casi dos horas que dura la película, algo que es de agradecer en este tipo de cintas.
La única pega que le pondría achacar a esta cinta, que no deja de ser una película de entretenimiento dirigida al público juvenil, es su desenlace, o más bien su falta del mismo, ya que como todos nos podríamos imaginar, y más conociendo que se trata de una saga literaria compuesta de dos partes más, todo queda en el aire, y es que apenas hemos podido vislumbrar un pequeño porcentaje de la historia global y del mundo presentado en las novelas.
Tanto Fox como Wes Ball, que continuará como director, ya han confirmado la segunda parte, que llevará el título de The Scorch Trails (Las Pruebas), donde solo nos queda esperar a que todas nuestras preguntas, al igual que las del protagonista, queden resueltas en sucesivas entregas.
En definitiva, si a partir del viernes 19 de Septiembre, fecha en la que la cinta llega a los cines españoles,  te apetece ver una entretenida película de ciencia-ficción, con tintes de Perdidos y de El Señor de las Moscas, con una historia que mantiene el misterio, y con unos efectos especiales bastante aceptables, esta es sin duda la mejor opción para disfrutar en el cine. Si eres una joven cinéfila, y además de todas estas razones, necesitas alguna más, te diré que el reparto es un grupo de jovencitos de muy buen ver que quizás sean el reclamo que necesitas para acercarte al cine si es que no te atraen mucho las historias de ciencia-ficción.

5 de septiembre de 2014

Líbranos del mal (Scott Derrickson, 2014)

Líbranos del mal, enésima cinta de terror inspirada en casos reales, se estrana hoy mismo en las pantallas españolas.
Según reza la frase publicitaria que aparece en su cartel, la película está inspirada en una serie de casos reales en las que se vio envuelto Ralph Sarchie, oficial del departamento de policía de Nueva York. Dudo bastante que los casos investigados por el mencionado sargento sucedieran tal y como se cuenta en esta inclasificable cinta que puede llegar a descolocar al espectador, ya que su director no sabe muy bien si lo que nos quiere contar es un thriller sobrenatural con trazas de policíaco, o más bien un thriller policíaco con trazas sobrenaturales.
Scott Derrickson, un director de carrera algo irregular y con películas como El exorcismo de Emily Rose o el remake de Ultimátum a la Tierra en su haber, obtuvo hace unos años un moderado éxito con la cinta de sustos Sinister.
En su último trabajo, Derrickson regresa al género del terror sobrenatural para relatarnos una extraño caso de posesiones demoniacas, investigado por un descreído policía de Nueva York, interpretado por Eric Bana (Troya, Hulk), que pronto se verá obligado a pedir la ayuda del Padre Mendoza, un nada ortodoxo sacerdote especialista en exorcismos, interpretado por el actor venezolano Édgar Ramirez (La noche más oscura, El consejero), dando como resultado una especie de estrambótica buddy movie que, como he comentado antes no tiene muy claro a que género acogerse en ningún momento.
Tras un prólogo que nos sitúa en Irak donde tres soldados pertenecientes a los marines estadounidenses descubren algo extraño en una cueva oculta, la acción salta tres años en el tiempo y nos transporta a una ciudad de Nueva York, oscura y lúgubre donde se nos presenta de manera efectiva el atormentado carácter del personaje protagonista.
Con un guión escrito por el propio Derrickson, junto a Paul Harris Boardman, basándose en el libro del propio Ralph Sarchie, la cinta sabe construir de manera acertada una cierta tensión que mantenga interesado al espectador durante su primera mitad. Acertando de pleno sugiriendo, más que mostrando, al supuesto "villano" de la historia y limitando sus apariciones lo menos posible, pero lamentablemente, y según se va desarrollando la trama la película se va sumergiendo en todos los clichés manidos del género de terror, e incluso llegamos a ver persecuciones y alguna que otra pelea más propias de una película de acción, hasta llegar al inevitable exorcismo que se suele mostrar en el clímax de este tipo de películas.
Acompañan a los dos actores protagonistas, dos conocidos rostros televisivos como Olivia Munn (The Newsroom) y Joel McHale (Community), cumpliendo ambos eficazmente, pero especialmente McHale que muestra generosamente sus dotes humorísticas, erigiéndose como el alivio cómico de la cinta.
Aquellos que se acerquen al cine a ver Líbranos del mal y esperen la película de terror definitiva, quizá se sientan bastante decepcionados, ya que lo único que encontraran es una extraña mezcolanza de géneros, con algunos momentos que pueden producir la emoción contraria a la pretendida por el director, que sin ningún tipo de vergüenza se regodea en mostrar todo el catálogo de sustos del manual de este tipo de cine. En definitiva, una cinta entretenida para pasar el rato y poco más, pero que nos hace lamentarnos por la oportunidad perdida de, con los mimbres propuestos, haber creado una película verdaderamente terrorífica.

2 de septiembre de 2014

Hércules (Brett Ratner, 2014)

De todos es sabido que la modas en Hollywood son cíclicas, y gracias a éxitos como 300 de Zack Snyder o Noé de Darren Aronofsky, uno de los géneros que está volviendo con más fuerza es el denominado Peplum, que en estos últimos años está viviendo todo un revival gracias a una serie de cintas de calidad irregular que adaptan historias mitológicas. Como suele ocurrir en Hollywood, varios estudios suelen coincidir en cuanto a la historia que nos quieren contar y uno de los ejemplos más recientes ha sido el héroe mitológico Hércules, que este año ha visto como su leyenda ha sido llevada al cine en dos ocasiones, siendo la primera de ellas la dirigida por Renny Harlin, que he de confesar que no he visto aún, y la segunda, la dirigida por Brett Ratner, que este mismo viernes se estrena en los cines españoles, con Dwayne Johnson como principal reclamo.
Basada en los cómics de Radical Comics, escritos por el guionista Steve Moore, Hércules supone una nueva vuelta de tuerca al mito del semidiós griego despojándolo por completo de toda divinidad y humanizando a un personaje que aquí se nos presenta como el lider de una banda de mercenarios que vende sus servicios al mejor postor, y que gracias a una serie de argucias y engaños han ido fomentando a lo largo de los años el misterio sobre el origen divino de Hércules.
Aún siendo Dwayne Johnson el protagonista principal, el guión firmado por Ryan J. Condal y Evan Spiliotopoulos no se olvida de los personajes secundarios que dan réplica al enorme actor, acompañado por actores como Ian McShane o Rufus Sewell, que dan vida a este variopinto grupo de mercenarios, cada uno con una habilidad especial, que pueden recordarnos a una especie de proto superhéroes, y que tienen algunos momentos especialmente brillantes. Completan el reparto los veteranos John Hurt y Peter Mullan, que cumplen eficientemente en sus papeles, y un sobreactuadísimo Joseph Fiennes que en mi opinión es sin duda lo peor de la cinta.
Ratner, director de estudo con oficio, coloca la cámara con bastante brío y la cinta no se resiente en ningún momento, manteniendo el ritmo en prácticamente todo su metraje, mostrando además un diseño de producción bastante acertado, con varias escenas de acción realmente espectaculares donde el bueno de Johnson se despacha a gusto aplastando cabezas y rompiendo miembros a sus enemigos, e incluso en los momentos más relajados, uno no llega nunca a aburrirse gracias a los diálogos ágiles y frescos de los acompañantes de Hércules, que dan el tono humorístico a la película.
Como nota curiosa destacar que en el poster español aparece Irina Shayk, la modelo/actriz actual novia del futbolista Cristiano Ronaldo, como reclamo para atraer al público español a las salas, y realmente la bella señorita apenas aparece en pantalla en un par de escenas y creo recordar que solo pronuncia una frase.
En definitiva, Hércules es una cinta de acción y aventuras sin pretensiones de ningún tipo, y cuya única finalidad es la de mantener entretenido al espectador que acuda al cine con el sano propósito de pasar un buen rato durante sus 98 minutos de duración. Cine de evasión de lo más disfrutable.

28 de junio de 2014

Mi otro yo (Isabel Coixet, 2013)

Tenía bastante curiosidad por ver Mi otro yo, la última película de Isabel Coixet, en la que la directora catalana dejaba atrás sus particulares universos dramáticos para asomarse a un género, a priori, tan atractivo como el psicotrhiller con tintes terroríficos, donde nunca me hubiese atrevido a situar a la directora de dramas tan potentes como Mi vida sin mí o La vida secreta de las palabras.
Coixet se basa en la novela homónima de Cathy MacPhail para escribir una historia en la que nos presenta a una chica llamada Fay, interpretada por Sophie Turner, o lo que es lo mismo Sansa Stark de Juego de Tronos, a la que comienza a acechar una misteriosa chica idéntica a ella, que planea suplantarla y tomar su lugar.
Fay, cuya vida no es nada fácil, además de enfrentarse con los extraños e inexplicables sucesos que le están ocurriendo, debe lidiar además con un hogar desestructurado en el que el matrimonio de sus padres, interpretados por Rhys Ifans y Claire Forlani, no está pasando por uno de sus mejores momentos.
Con una interesante premisa argumental del doble que quiere suplantar a la protagonista, en Mi otro yo se dan la mano argumental y estéticamente unas muy evidentes influencias de varias cintas de terror asiático moderno, algún que otro susto de esos que no te esperas, pero sobre todo las tensiones dramáticas entre los personajes protagonistas, a su favor hay que decir que visualmente es bastante potente y que posee una atmósfera opresiva y perturbadora que juega muy a favor del espíritu de la película.
Completan el competente reparto, nombres tan interesantes como Jonathan Rhys Meyers, la veterana Geraldine Chaplin, y las españolas Ivana Baquero, la ya crecidita niña de la gran El Laberinto del Fauno, y Leonor Watling que no sabemos muy bien como ha llegado a conseguir trabajo en un instituto de Cardiff, ciudad galesa donde se desarrolla esta producción hispano-británica.
A pesar de ser una cinta que en un principio podríamos pensar que se adscribe en el género de terror psicológico, en ningún momento la directora abandona sus señas de identidad y aparte de mostrarnos algún que otro susto y alguna que otra escena desasosegante, principalmente se centra en las relaciones entre los personajes y los dramas que surgen entre ellos, por lo que quizá los espectadores despistados que se acerquen al cine en busca de una película genuinamente terrorífica puede que se van terriblemente decepcionados al encontrarse con un film al más puro estilo Coixet, con lo que eso conlleva.

5 de junio de 2014

X-Men: Días del futuro pasado (Bryan Singer, 2014)

Tras el éxito obtenido por la entretenida X-Men: Primera Generación, film por el que nadie apostaba y que acabó convirtiéndose en una de las mayores sorpresas del 2011 en cuanto a cine superheróico, los responsables de Fox lo tuvieron claro, el reboot o precuela de la franquicia mutante contaría con su correspondiente secuela que ha tardado tres años en gestarse.
El proyecto, como suele pasar en estas superproducciones de gran presupuesto, contó con varias reescrituras y cambios de director, y cuando en un principio todos parecía indicar que Matthew Vaughn sería el director de la secuela, éste abandonó el barco para enrolarse junto a su amigo Mark Millar en el proyecto de adaptación del cómic del guionista escocés The Secret Service.
La elección para sustituirle era bastante obvia, y Bryan Singer, director de las dos primeras partes de la primera trilogía y productor de la tercera, fue el elegido, para hacerse con las riendas de este enorme proyecto.
Con Singer a los mandos, hubo algunas dudas sobre qué camino tomaría la historia y cuales serían los personajes que aparecerían en Días del futuro pasado, título que hace referencia a la mítica historia escrita y dibujada magistralmente por Chris Claremont y John Byrne respectivamente, ya que los aficionados a la franquicia  no estaban muy seguros de si se continuaría con los personajes presentados en Primera Generación o si por el contrario, Singer haría borrón y cuenta nueva y continuaría su historia justo donde la dejó al abandonar precipitadamente X-Men: The Last Stand para marcharse a dirigir Superman Returns. Para la Fox la respuesta a estas dudas fue muy sencilla, y fue, obviamente, mezclar las dos "historias" presentadas hasta ahora, y a todos los personajes, y ver qué es lo que ocurría en una película que desde que se anunció fue el sueño humedo de cualquier aficionado a los cómics de mutantes, sobre todo por tomar el título, y adaptar bastante fielmente, una de las mejores historias que han tenido los mutantes durante toda su historia editorial.
Días del futuro pasado, sigue prácticamente al dedillo lo contado en el cómic de Claremont y Byrne, y nos presenta un desolador futuro post-apocalíptico, o más bien dicho un presente, en el que los humanos y los mutantes están en guerra y estos últimos son perseguidos y asesinados por unos temibles robots llamados Centinelas que además de asesinar a los mutantes se encargan de enviarlos a campos de concentración, junto a los humanos que se atreven a ayudarlos.
Un pequeño grupo de mutantes entre los que podemos ver a casi todos los personajes presentados en la primera trilogía, y a algunos nuevos mutantes que hacen su debut en esta nueva entrega de la franquicia, intentarán evitar este terrible panorama enviando la conciencia de uno de ellos a su yo del pasado, concretamente a 1973, con la misión de avisar a los mutantes que conocimos en Primera Generación, y entre todos poder evitar un asesinato que de producirse acabaría con la totalidad de la especie mutante y sumiría al mundo en la angustiosa pesadilla apocalíptica en la que se encuentran.
No quiero desvelar más del argumento, para que podáis sorprenderos en el cine, así que solo comentaré algunas impresiones sobre la película que me parece interesante destacar como las espectaculares y vibrantes, y sin embargo, escasísimas escenas que se desarrollan en el "futuro", que hacen que echemos en falta que se nos mostrara más detalladamente este mundo sin esperanza en el que los mutantes son cazados como ratas por los Centinelas. Otro de los aspectos positivos es la conseguida ambientación setentera del film, que logra transportar al espectador al año 1973, año en el que se desarrolla la mayor parte del metraje.
No quiero dejar de destacar la, breve pero intensa, aparición de cierto mutante velocista de cabellos plateados, que protagoniza uno de los segmentos más divertidos de la película, y que lamentablemente solo aparece unos minutos dentro del film, dando la impresión de que su aparición es un pegote añadido quizás por temas de derechos, ya que el personaje hace acto de presencia y desaparece y escaso peso argumental tiene posteriormente en la trama.
El elenco de actores, al unir a las estrellas de las dos sagas producidas hasta la fecha, es de auténtico vértigo, y da un poco de pena que la acumulación de actores propicie que algunos como por ejemplo Hale Berry, solo tengan un par de líneas de diálogo y otros solo aparezcan fugazmente en pantalla, como es el caso de Anna Paquin.
El protagonismo en esta quinta entrega recae en los hombros del inevitable y carismático Lobezno, interpretado por un Hugh Jackman al que le van pesando cada vez más los años, a pesar de su poderío físico, también sobre un joven Charles Xavier, brillantemente interpretado por un torturado James McAvoy, que tendrá que hacer una gran elección que cambiará su vida y sobre todo en Mística, a la que da vida Jennifer Lawrence, una de las actrices del momento, que se convierte, gracias a la magia de su agente y del caché, en el personaje en el que gira toda la trama y que será sin duda uno de los reclamos para el gran público. Mención especial merecen Bolivar Trask, al que da vida el televisivo Peter Dinklage, convertido en un villano muy a su pesar, y un joven Magneto, interpretado por un Michael Fassbender con piloto automático, que nos hace añorar su gran interpretación en Primera Generación, y que aquí veremos como esperará su oportunidad para sacar provecho de la situación.
Como puntos negativos habría que señalar la falta de ritmo en algunos momentos, la opción de tener a un montón de mutantes disponibles y que luego estos apenas aparezcan en pantalla y algunos diálogos reiterativos e interminables que se podrían haber obviado. A pesar de tener menos humor, y menos escenas de acción de lo esperable en una producción de este calibre, la cinta mantiene el tipo durante las dos horas que dura y entretiene, que ya es bastante en estos tiempos que corren, logrando su principal objetivo que es la de servir de nexo de unión de las dos "historias" presentadas hasta la fecha, dejando todas las tramas cerradas y a todos los mutantes listos para las nuevas historias que están por venir, de las que, por cierto, ya se ha anunciado la siguiente entrega que llevará por título Apocalipsis y que se estrenará en 2016.
En definitiva, X-Men: Días del futuro pasado es una cinta bastante digna que entretiene, pero que dejará al espectador con una sensación de oportunidad perdida, ya que el aficionado a la franquicia podría haber podido disfrutar de la película de mutantes definitiva, que hubiera podido competir incluso con Los Vengadores como mejor película de superhéroes jamás rodada, pero que sin embargo nos deja con un regusto agridulce. Esperaremos con ganas las nuevas entregas mutantes.
Un consejo, quédense hasta el final de los títulos de crédito, que hay sorpresa.

10 de abril de 2014

The Amazing Spider-man 2: El poder de Electro (Marc Webb, 2014)

El próximo jueves 17 de Abril, coincidiendo con los días festivos de Semana Santa, llega a las pantallas españolas The Amazing Spider-man 2: El poder de Electro, la esperada secuela de Amazing Spider-man dirigida por el también director de la primera entrega, Marc Webb.
Webb fue bastante criticado por una primera entrega que, a pesar de funcionar bastante bien en taquilla, no acabó de contentar a los fieles seguidores del trepamuros, que seguían defendiendo, obviando la tercera entrega, la versión que el director Sam Raimi había dado de la franquicia anterior, que aún estaba reciente en los corazones de los aficionados.
Pero, como todos sabemos, los personajes son franquicias y los poseedores de los derechos de Spider-man no van a detener una máquina de hacer dinero tan potente, así que tras el mencionado reboot de la franquicia, a cargo del director de (500) días juntos, se presentó este proyecto en el que continúan las aventuras de Peter Parker y su alter ego Spider-man.
La película es continuista con respecto a la primera parte, y el guión firmado por Alex Kurtzman, Roberto Orci y compañía nos presenta a un Peter Parker que, a pesar de seguir aún afectado por la muerte del Capitán Stacy, no ha renunciado a seguir combatiendo el crimen como veremos en una espectacular escena inicial en la que el espectador podrá contemplar a Spider-man y sus acrobacias en todo su esplendor, al tiempo que según se van desarrollando las diferentes tramas del film, asistiremos a cómo Peter prosigue indagando en los hechos que ocultan la misteriosa muerte de sus padres, a los que culpa por haberle abandonado.
Además de seguir con su lucha contra el crimen, Peter y Gwen Stacy continúan como pareja, a pesar de algunos problemillas y malentendidos que se irán desarrollando a lo largo de la película, momentos estos en los que Marc Webb se luce especialmente, sacándole el máximo partido a la relación que los dos actores protagonistas, Andrew Garfield y Emma Stone, mantienen en la vida real, mostrando en pantalla una increíble química como jóvenes enamorados.
Como novedades, y además de Electro, interpretado por Jamie Foxx, al que podríamos de calificar como villano principal de la función, veremos la presentación en sociedad de dos personajes importantísimos dentro de la mitología del arácnido, como son Norman Osborn (Chris Cooper) y su hijo Harry (Dane DeHaan), que desencandenarán una serie de inevitables acontecimientos que se irán desarrollando en las anunciadas secuelas, y que prometen darle bastantes quebraderos de cabeza al lanzarredes.
La aparición en el film de un villano como Electro, acompañado de sus poderes eléctricos, permite que las pocas escenas de acción que se muestran en la película brillen con luz propia (perdón por el chiste malo), siendo de lo más espectacular de la película en cuanto a escenas de acción, junto a algunas escenas de Spider-man balanceándose por la ciudad que vistas en 3D deben ser tremendamente apabullantes para el espectador.
La única pega que le podría poner a las escenas de acción es el abuso de la cámara lenta, que seguramente en 3D sean dignas de ver, pero que restan espectacularidad y sobre todo rapidez a las escenas de acción.
Como valoración personal, esta segunda parte no me ha acabado de convencer del todo, a pesar de todas sus virtudes, que las tiene, pero me ha gustado bastante más que la primera, que he de reconocer que me dejó más bien frío y me hizo añorar la dos primeras películas de la trilogía de Sam Raimi.
Aún así, es digno de elogiar el tono alegre y desenfadado, con muchos detalles dirigidos a la chavalería, que han querido imprimirle a esta segunda parte, alejándose del tono oscuro que planeaba sobre la primera parte y equilibrando las diferentes escenas de acción, dramáticas y sobre todo humorísticas, bastante mejor que su predecesora intentando asemejarse a las producciones de Marvel Studios.
En definitiva, si os gustó la primera parte, esta continuación os chiflará y, si por el contrario, no os acabó de convencer la primera parte, como fue mi caso, dadle una oportunidad, ya que al menos se ve el intento por parte de sus responsables de ir por otro camino y de mejorar los aspectos que no acabaron de funcionar de la primera parte.

13 de marzo de 2014

Una vida en tres días (Jason Reitman, 2013)

Tras ganarse el respeto de crítica y público por títulos como Juno o Up in the Air, el director Jason Reitman se ha hecho por fin un nombre en Hollywood y ha dejado de ser conocido como "el hijo de Ivan Reitman", o "el hijo del que dirigió Cazafantasmas".
Con una filmografía tan interesante como ecléctica a sus espaldas, Reitman ha sabido moverse cómodamente en los terrenos del drama y la comedia y ha sabido imprimir en todos sus films su particular sello de autor que hacen reconocible su estilo para el espectador.
Con algunos meses de retraso con respecto a su estreno en Estados Unidos, este fin de semana llega a las pantallas españolas su última cinta titulada Labor Day, aquí traducida como Una vida en tres días, una historia basada en la novela homónima de la escritora Joyce Maynard, que nos cuenta como la vida de Adele (Kate Winslet) y su hijo adolescente Henry (Gattlin Griffith), dará un giro radical al irrumpir en sus vidas el personaje de Frank (Josh Brolin), un convicto fugado que convivirá junto a ellos durante el puente del Día del Trabajo.
Con una historia plagada de tópicos que nos da la sensación de situaciones ya vistas en el cine y que podría recordar más de uno a cualquier Tv movie de sobremesa de los que emite Antena 3 cualquier fin de semana, se nos presenta a través de los ojos de Henry de una manera original al irnos desvelando sorprendentes detalles del pasado de Adele y Frank, que se van mostrando de manera dosificada por parte del director de manera brillante gracias a un montaje que no hace concesiones al espectador y que mantiene en tensión al espectador en todo momento.
Además de la previsible relación que los dos personajes protagonistas mantienen durante la historia, es interesante destacar el arco del personaje de Henry, que con la llegada del carismático Frank a su vida comenzará a entablar una entrañable relación de padre e hijo con este personaje, al tiempo que comienza a descubrir con cierta curiosidad, como cualquier adolescente, su despertar sexual y su paso de la niñez a la adolescencia.
El guión escrito por el propio Reitman se sabe mover con acierto entre géneros tan dispares como el drama y el suspense, saliendo bastante airoso en su resultado final y que nos revela a un director que, además de saber manejar las teclas del drama como ya hemos visto en sus anteriores trabajos, sabe mantener al espectador en tensión en algunas escenas que no desentonarían en una película de suspense.
Una vida en tres días es una propuesta muy recomendable que no debéis dejar de pasar a poco que os interese la filmografía anterior de su director, o si por otro parte os interesa mínimamente el trabajo actoral del trío protagonista que en esta película están los tres francamente soberbios.

8 de marzo de 2014

Las aventuras de Peabody y Sherman (Rob Minkoff, 2014)

Este fin de semana acaba de estrenarse en las salas españolas Las aventuras de Peabody y Sherman, la nueva producción de los estudios de animación Dreamworks. Avalada por el éxito que en su día tuvo Los Croods, la anterior cinta del estudio, y por el prestigio de su director, Rob Minkoff, co-director de El Rey León, y con varias producciones dirigidas al público familiar como por ejemplo Stuart Little o La Mansión Encantada en su currículum.
Peabody, un perro que habla y con una inteligencia fuera de lo común, y su hijo Sherman son dos personajes arraigados en el acervo de la cultura popular americana desde que a finales de los años 50 protagonizaran algunos breves episodios dentro de la serie animada Rocky and His Friends, más conocida como The Rocky and Bullwinkle Show, cuyos personajes también protagonizaron una película en 2000 que combinaba animación 3D con prestigiosos actores reales como Robert De Niro o Rene Russo, entre otros.
Apenas conocidos en nuestro país, solo hemos podido ver a los personajes Peabody y Sherman haciendo puntuales cameo-homenajes en episodios de series de animación tan populares como Los Simpson y Padre de Familia.
En esta nueva película de animación en 3D, escrita por Craig Wright, guionista que proviene del mundo de las televisión que ha trabajado para series como Perdidos, Cinco hermanos o A dos metros bajo tierra, se recupera el espíritu de la serie de animación original, y tras presentar brevemente a los personajes, nos muestra como Peabody y Sherman se embarcan en frecuentes viajes a través del tiempo para visitar con interés educativo momentos claves de la historia, como por ejemplo el antiguo Egipto o el París de La Revolución Francesa, y conocer de primera mano en sus viajes a personajes célebres como los divertidos Leonardo Da Vinci o Maria Antonieta, entre otros, provocando con su interacción momentos de lo más graciosos ya que los protagonistas desencadenan, sin saberlo, muchos de esos puntos de inflexión importantes que han cambiado la historia de la humanidad.
Todo se complicará cuando aparezca en escena el personaje de Penny, una chica de la clase de Sherman que convencerá a éste para que le enseñe el Vueltatrás, la máquina del tiempo que el Sr. Peabody le ha prohibido terminantemente usar si su supervisión. A partir de ahí y como era de preveer, Sherman y Penny alterarán momentos de la historia que provocarán una serie de paradojas temporales que deberán arreglar con la ayuda del Sr. Peabody.
La cinta, que no esconde su interés educativo, está dirigida claramente a un público infantil, pero por otra parte muestra algunos guiños hilarantes que sin duda el público adulto sabrá disfrutar.
Las aventuras de Peabody y Sherman es una entretenida película recomendada para todo la familia, que alberga en su metraje algunos momentos realmente divertidos, cuenta además con una gran banda sonora compuesta por Danny Elfman, y, por si estas no fueran razones suficientes, muestra al espectador alocados viajes en el tiempo, siendo ésta última, razón suficiente para acercarse al cine a ver la película.

12 de febrero de 2014

RoboCop (José Padilha, 2014)

El próximo viernes 14 de Febrero se estrena en todo el mundo RoboCop, otro remake más que se une a la extensa lista de películas ochenteras que en los últimos años han ido contando con nuevas versiones. Si hace un tiempo llegó a las pantallas una nueva versión de Desafío Total, ahora nos llega la puesta al día de la película que en 1987 dirigiera el holandés Paul Verhoeven.
Vaya por delante que siempre es complicado enfrentarse a remakes de películas ochenteras que el público ha ido mitificando a lo largo de los años al crecer con ellas, a pesar de su discutible calidad, y es que ya se sabe que la nostalgia es mala compañera cuando a uno le da por recordar ciertas películas que no llegan a envejecer del todo bien.
Como la historia del personaje es de sobra conocida por todos voy a ahorrarme contar el argumento principal del que parte esta nueva versión del director brasileño José Padilha, que aparte de eso, poco o nada tiene que ver con la de Verhoeven, ya que ambas transitan por caminos ligeramente reconocibles, con varios guiños-homenajes incluidos, pero a su vez son bastante diferentes en sus planteamientos y lógicamente en su resultado final.
Tras salvar innumerables injerencias de los productores que tuvieron lugar durante el rodaje, y que llevaron a Padilha a desesperarse en más de una ocasión, el director de la magnífica Tropa de Élite ha trabajado con el guión escrito por Joshua Zetumer para alejarse bastante de la historia original, y mostrarnos una compleja trama política que sirve de trasfondo al drama psicológico y emocional del policía blindado, incidiendo en mostrar el drama que viven la esposa e hijo del protagonista, y el suyo propio al verse convertido en una máquina.
En el apartado actoral, hay que destacar los papeles de tres grandes actores como son Gary Oldman, que puede que sea de lo mejor de la película en su papel del Dr. Dennett Norton, un personaje con gran peso para la trama del film; Samuel L. Jackson, que está inmenso comiéndose la pantalla con cada una de sus intervenciones; y por supuesto y no nos olvidamos del ya veterano y carismático Michael Keaton. Por supuesto mención especial merecen también el protagonista Joel Kinnaman, rescatado de su papel de detective en la serie The Killing para encarnar a los míticos Alex Murphy y RoboCop, y a su compañero Jack Lewis (ahora Lewis es hombre y es de color), interpretado por Michael K. Williams, el inolvidable Omar Little de The Wire, que no tienen mucho material con el que lucirse, pero que tampoco lo hacen del todo mal.
Aquellos fans del film original que esperen acción desenfrenada, puede que se sientan defraudados, ya que a pesar de tener varias escenas de acción enérgica, y en ocasiones originalmente, rodadas, no podríamos calificar este RoboCop de cinta de acción al uso, ya que la trama es bastante más compleja de lo que uno podría haberse imaginado en un principio.
Para todos aquellos que se acerquen al cine temiendo encontrarse una película que copia punto por punto a la original, pueden estar tranquilos, ya que si se olvidan por un momento de que esta cinta es un remake disfrutarán de este competente y entretenido thriller policiaco con elementos de ciencia-ficción.

25 de enero de 2014

Jack Ryan: Operación Sombra (Kenneth Branagh, 2014)

Antes de comenzar con esta reseña quiero confesar que no he visto ninguna de las aventuras cinematográficas previas del agente de la CIA Jack Ryan, por lo que no haré ningún tipo de comparaciones con las anteriores versiones del personaje, que en sus cuatro films anteriores llegó a estar interpretado hasta por tres actores diferentes: Alec Baldwin (La Caza del Octubre Rojo), Harrison Ford (Juego de Patriotas y Peligro Inminente) y Ben Affleck (Pánico Nuclear).
En Operación Sombra, que podríamos calificar como un nuevo reboot para la franquicia del personaje literario creado por Tom Clancy, asistimos a lo que podríamos llamar origen del personaje, encarnado en esta nueva cinta por Chris Pine, un actor joven conocido en todo el mundo por interpretar al mítico James T. Kirk, en el reboot de la exitosa franquicia de Star Trek ideada por J. J. Abrams. De este modo, asistiremos a sus años como marine, veremos como es reclutado como analista para la CIA por el veterano agente Thomas Harper, interpretado por el siempre solvente Kevin Costner, y veremos como compagina su vida de pareja junto a su prometida, la Dra. Cathy Muller, interpretada por Keira Knightley. Trabajar como analista en la CIA no puede ser de lo más gris y anodino para Jack Ryan, hasta que un día unos extraños movimientos bancarios procedentes de Rusia hacen sospechar a Ryan de que algo podría estar cociéndose, por lo que alerta a sus superiores que le asignan la misión de viajar a Rusia para investigar en primera persona los movimientos bancarios generados en una gran empresa propiedad del magnate ruso Viktor Cherevin, interpretado por Kenneth Branagh, que es a su vez el director de la cinta.
Tras dirigir la primera parte de Thor para Marvel, Branagh sigue demostrando que es muy capaz de dirigir cintas para grandes estudios como Operación Sombra, en la que sabe conjugar una interesante y sobria trama de espionaje en su primera parte, para continuar con una rocambolesca misión en las inexpugnables oficinas de Cherevin, que puede recordar a algunas misiones de la saga Misión Imposible de Tom Cruise, y en su tercer acto finalizar con la dosis de acción que se le presupone siempre a este tipo de películas. Hay que mencionar que Branagh se regala a sí mismo uno de los papeles más interesantes del film, el del villano frío y despiadado, evitando todo tipo de sobreactuación exagerada muy propia de este tipo de papeles, algo que es de agradecer.
Como estupendo está también Kevin Costner, que a pesar de su edad sigue llenando la pantalla con esa aureola de gran actor veterano, a pesar de sus escasas apariciones.
Chris Pine cumple con creces interpretando al joven e inexperto Ryan, que de la noche a la mañana debe pasar de simple analista a agente de campo metiéndose de lleno en la acción, mientras que por su parte Keira Knightley intenta hacer creíble el papel de abnegada pareja del héroe, un papel que llega a ser, reconozcamolo, bastante innecesario para la trama principal.
Operación Sombra nos presenta de este modo un escenario en el que una hipotética Tercera Guerra Mundial se cierne sobre el horizonte, una Guerra que dejaría a Estados Unidos al borde del colapso económico, donde las operaciones bursátiles tomarían el lugar del armamento convencional, en esta entretenida película que nace con vocación de franquicia, que si funciona bien en taquilla imaginamos que podría lugar a varias continuaciones debido a la juventud de los dos actores principales, Chris Pine y Keira Knightley que puede ser un atractivo reclamo para el espectador.

8 de enero de 2014

Lluvia de Albóndigas 2 (Cody Cameron y Kris Pearn, 2013)

Estrenada en nuestro país en 2009, y contando con el por aquel entonces popular Flippy de El Hormiguero como voz del personaje protagonista, la magnífica y divertida Lluvia de Albóndigas, no terminó de ser un gran éxito al nivel de las producciones de Pixar o Dreamworks, pero sin embargo si cosechó muy buenas críticas llegando a conseguir el éxito suficiente para que el estudio de animación responsable diera luz verde a una secuela que acaba de desembarcar en las carteleras españolas.
Además de las buenas críticas obtenidas, los directores Phil Lord y Christopher Miller consiguieron el reconocimiento necesario para encargarse de dos nuevos proyectos, la muy divertida Infiltrados en clase, película protagonizada por Jonah Hill y Chaning Tatum y el esperado (al menos por mí) film de animación Lego, La película, que llegará a las pantallas españolas el próximo 7 de Febrero.
Dirigida por Cody Cameron y Kris Pearn, esta nueva entrega de las alocadas aventuras del excéntrico inventor Flint Lockwood, retoma la acción justo donde terminaba la primera parte y nos vuelve a presentar a los personajes que protagonizarán esta nueva aventura, que deben abandonar la isla en la que habitaban, al quedar esta arrasada tras el apocalipsis gastronómico consecuencia de una de las invenciones de Flint.
A pesar de la catástrofe, el famoso inventor Chester V (que nos recordará al fallecido Steve Jobs), director de la prestigiosa The Live Corp Company, invita a Flint a formar parte de su empresa con el fin de usar su talento para desarrollar nuevas ideas e invenciones que cambien el futuro del mundo.
Cuando Chester V descubre que la máquina creadora de comida que Flint creó en la primera parte, ha comenzado a crear una serie de híbridos mezcla de animales y comida llamados Comidanimales de lo más variopinto y colorido, éste envía a Flint y a sus amigos a su antigua isla con el fin de recuperar la invención de Flint y salvar a la humanidad.
Lluvia de Albóndigas 2 no llega al nivel de hilaridad que me produjo la primera parte, pero en algunos momentos y en algunos gags concretos llega a alcanzar el nivel de genialidad de su predecesora, no obstante es una muy divertida película de animación en 3D, que recupera el espíritu de las películas de aventuras en parajes exóticas más clásicas y deja un regustillo de lo más agradable tras su visionado.
La única pega que podríamos poner a Lluvia de Albóndigas 2, y es una práctica cada vez más habitual  en cuanto a películas de animación que llegan a nuestro país, es la de buscar a actores españoles que no son especialistas en doblaje para prestar sus voces a los personajes, lo que desmerece en algunos momentos el disfrute de la película y cuya razón no es la de atraer a un público infantil, ya que muchas veces los niños que van a ver la película no saben ni quienes son los actores "famosos" que doblan a sus personajes de animación favoritos.
En definitiva, Lluvia de Albóndigas 2 es una película muy recomendable para llevar a los niños al cine en estas fechas post-navideñas en las que apenas se han estrenado películas orientadas a un público infantil, y cuyo 3D es sencillamente espectacular.
Y para terminar, solo me resta aconsejar a los verdaderos amantes de la animación, en todo su más amplio espectro, a que se queden a ver los títulos de crédito finales, ya que gozarán de lo lindo ante todo un abanico de técnicas de animación que van de la más tradicional a la animación de plastilina.