9 de octubre de 2013

Grand Piano (Eugenio Mira, 2013)

El director alicantino Eugenio Mira, con tan solo tres películas en su filmografía, ha conseguido forjarse una reputación de director de culto que comenzó con The Birthday (2004), en la que contó con el mítico y ochentero Corey Feldman como actor principal. Años más tarde estrenaría Agnosia (2010), con guión de Antonio Trashorras.
Elegida para inaugurar la 46 edición del Festival de Cine Fantástico de Sitges, el 25 de Octubre llega a las pantallas españolas Grand Piano, su tercera película hasta la fecha que cuenta con Rodrigo Cortés (Buried, Luces Rojas) como productor, y con un reparto internacional encabezado por Elijah Wood, conocido por encarnar a Frodo en la saga de El Señor de los Anillos y que no para de encadenar films con cierto interés últimamente, y por John Cusack, un actor de lo más solvente que en los últimos tiempos está obteniendo grandes papeles secundarios y al que hemos visto recientemente en El Mayordomo.
Grand Piano nos cuenta la historia de Tom Selznick (Elijah Wood), un joven pianista de gran talento que, tras una actuación hace años en la que falló al intentar interpretar una pieza de complicada ejecución, regresa para realizar un gran concierto en el que será su regreso a los escenarios. Cuando todo está listo para comenzar, se sienta al piano y encuentra en sus partituras una nota con el siguiente mensaje: "Si fallas una nota, estás muerto". A partir de ahí el film comienza un tenso juego entre Tom y el misterioso personaje que le amenaza a él, y a su esposa, mientras el pianista intenta ejecutar su concierto a la perfección.
Emocionante y entretenida desde el primer minuto, la película está narrada con un pulso que nos puede recordar en ocasiones a grandes maestros del suspense como son Alfred Hitchcock y Brian De Palma, Eugenio Mira aprueba con nota con Grand Piano, y se nos descubre como un gran director de thrillers, que con su último film está llamando energica y decididamente a las puertas de Hollywood, donde sin ninguna duda será bien recibido.

7 de octubre de 2013

Capitán Phillips (Paul Greengrass, 2013)

El próximo 18 de Octubre llega a las carteleras españolas la nueva película de Paul Greengrass, que a su vez también lo es de Tom Hanks, director y actor, a los que últimamente teníamos perdida la pista.
Greengrass, director de prestigio conocido por la famosa saga de Jason Bourne, se aleja de la ficción y afronta esta película basada en hechos reales, como ya hiciera en United 93, en la que nos cuenta la tensa y dramática historia del secuestro de un capitán de un carguero norteamericano por parte de piratas somalíes.
La historia nos traslada a 2009, donde en aguas internacionales cercanas a Somalia, el carguero Maersk Alabama, capitaneado por el Capitán Richard Phillips, fue asaltado por piratas somalíes, y veremos como se desarrolló el asalto y posterior secuestro del Capitán.
La película arranca con un ritmo pausado y casi de documental, donde el director nos va mostrando como es el día a día en la vida de una tripulación de un carguero, para de repente, y sin previo aviso, meternos de lleno en una acción vertiginosa y en un suspense que mantendrá en vilo al espectador, y que no se detendrá en las más de dos horas de metraje de la cinta.
Por su parte Hanks, gracias a este papel probablemente aparecerá en todas las quinielas de los principales premios de interpretación como los Globos de Oro o los Oscar, ya que el galardonado actor realiza un trabajo soberbio metiéndose en el papel del Capitán Phillips.
Es necesario mencionar la excelente elección de los actores que interpretan a los piratas somaliés, destacando a Barkhad Abdi, que interpreta a Muse, el líder de los piratas, y que por supuesto también son parte esencial de la historia, recayendo en ellos parte del peso de una película, en donde también se nos muestran las razones que les llevan a ejercer la piratería.
Narrada con un ritmo y un pulso endiablados, y lo del pulso no va con segundas cuando nos referimos a un director que ha sido criticado en más de una ocasión por mover demasiado la cámara en anteriores trabajos, y que aquí hay que señalara que la cámara se sigue moviendo con su sello característico, y sin embargo no llega a molestar demasiado y la acción se nos muestra de manera clara.
Aquellos que se acerquen al cine a ver Capitán Phillips, encontrarán un emocionante y entretenido film que nos recupera a un director que demuestra que sigue estando en forma a la hora de contar una historia y mantener el interés del espectador, y también nos recupera a un actor como Hanks, que está brillante en esta interpretación, y al que lamentablemente no veíamos en las pantallas españolas desde El Atlas de las Nubes, a la espera que se estrene su esperada y polémica Saving Mr. Banks, que nos llegará en Enero.

5 de octubre de 2013

Runner Runner (Brad Furman, 2013)

Acaba de estrenarse en los cines españoles Runner Runner, un thriller de manual que nos cuenta la historia de Richie Furst, un estudiante de la Universidad de Princeton que acaba perdiendo todo el dinero de su matrícula, tras apostarlo en un juego de póker online. Richie descubre que la web funciona con uns sistema que estafa a sus usuarios, por lo que decide viajar hasta Costa Rica, sede del emporio de apuestas online regentado por el millonario Ivan Block, al que irá a pedirle explicaciones. Una vez allí Block reconoce el talento de Richie y le ofrecerá trabajara para él dirigiendo sus casinos y gestionando sus webs de juego. A partir de ahí todo se complicará cuando entre en escena el personaje de Rebecca Shafran, amante de Block y por la que Richie apostará todo lo que ha conseguido.
Runner Runner cuenta con un reparto encabezado por Justin Timberlake, actor y cantante cada vez más en alza, y cuyos compañeros no le van a la zaga en cuanto a popularidad, comenzando por Ben Affleck, que interpreta a Ivan Block, el villano de la función, interpretado por el que está llamado a encarnar al nuevo Batman por mucho que les pese a algunos. El tercer vértice del triángulo, recae en Gemma Arterton, que poco a poco estamos viendo como va escalando posiciones en Hollywood. Otro de los papeles a destacar es el del Agente Shavers, interpretado por Anthony Mackie, el culturista impotente de la reciente Dolor y Dinero, y que pronto veremos dando vida al Halcón en el Capitán América: El Soldado de Invierno.
A pesar de contar con un reparto de calidad contrastada, la historia que nos presenta el director Brad Furman (El Inocente), nos deja con una sensación agridulce de que la cinta podría haber dado algo más de sí, y lamentablemente acaba resultando otro thriller más, bastante previsible y tópico.
La cinta posee algunos aspectos positivos, que valdría la pena destacar, como el arranque de la historia que es bastante potente, y que nos podría recordar, salvando mucho las distancias, al de La Red Social; varias de las bonitas localizaciones naturales rodadas en Costa Rica; algunas de las escenas que se desarrollan en las lujosas fiestas y en el casino; y por encima de todo el papel que interpreta Ben Affleck, un villano, a priori, risueño y buenrollero que acaba ocultando una faceta sádica e implacable.

3 de octubre de 2013

Gravity (Alfonso Cuarón, 2013)

No las tenía todas conmigo ante el estreno de Gravity, ya que, a priori, la sinopsis me daba la impresión de que la historia no podría dar mucho de sí por el reducido reparto y por las limitaciones del escenario en el que transcurre la acción. Tras ver la película confieso que me alegra haberme equivocado dando al traste con mis ideas preconcebidas, y una vez más hay que descubrirse ante Alfonso Cuarón, que con este film imparte toda una lección magistral de como hacer buen cine apoyado en un guión vibrante y en el uso de una emocionante narrativa.
Como ya he comentado antes, la historia, escrita a cuatro manos por el propio Alfonso y su hermano Jonás, no deja de ser una mera anécdota en la que, el director de Hijos de los Hombres, se apoya para construir una maravillosa historia en la que veremos la descarnada y terrible lucha por la supervivencia en el que es sin duda el peor de los escenarios imaginables: el frío y oscuro espacio exterior.
Tras una inesperada tormenta de asteroides, la pareja de astronautas formada por la doctora Ryan Stone (Sandra Bullock) y el veterano comandante Matt Kowalsky (George Clooney), queda a la deriva y con su transbordador destruido, por lo que intentarán por todos los medios conseguir regresar a la Tierra. A pesar de lo nimio del argumento la película ofrece toneladas de entretenimiento y un goce visual que dejarán al espectador pegado en su butaca en unos escasos noventa minutos de duración que son una imparable y adrenalítica montaña rusa que no se detiene hasta llegar a los títulos de crédito.
El talento cinematográfico de Cuarón ya no sorprende a nadie, y si ya en su anterior film demostró de lo que es capaz detrás de las cámaras, estoy seguro que con este nuevo trabajo volverá a obtener la aprobación de la crítica mundial. No estaría muy desencaminado si afirmara que Gravity debería ser considerada digna de estudio en las escuelas de cine, tomándose como ejemplo de como debe narrarse una historia con ritmo de manera magistral. Cuarón demuestra que domina el lenguaje cinematográfico y utiliza todo lo aprendido en su carrera con la única intención de dejar al espectador con la boca abierta durante prácticamente toda la película, con recursos tan variados como espectaculares escenas que se suceden a un ritmo vertiginoso, maravillosos planos secuencia, una cámara que da la sensación de estar viva y que no permite al espectador estar viendo la acción, si no estar dentro de ella, entre muchos otros. Todo para lograr que Gravity no sea una película al uso, si no que se convierta en toda una experiencia sensorial definitiva que es imprescindible disfrutar en una gran pantalla, con una buena calidad de sonido, y a ser posible en 3D. En definitiva, un viaje que no deja indiferente tras su visionado y una absoluta Obra Maestra. Una de las mejores películas del año.

2 de octubre de 2013

Byzantium (Neil Jordan, 2012)

Ecléctico es el adjetivo que podría resumir la filmografía del director irlandés Neil Jordan, y es que si estudiamos detenidamente el listado de sus películas veremos que no se ha encasillado en un único género y en su haber tiene comedias, dramas, trhillers e incluso historias fantásticas, como es el caso de Byzantium, su último film hasta la fecha.
Jordan, que consiguió un gran éxito en 1994 adaptando la novela de Ann Rice en el film Entrevista con el vampiro, vuelve a contarnos, bajo una mirada diferente, una nueva historia sobre vampiros, en esta caso vampiras, en esta película que está protagonizada por Saoirse Ronan, una de las jóvenes actrices del momento, conocida por su papel en Hanna, y una Gemma Arterton, con cada vez más protagonismo en sus últimas producciones, y a la que hemos visto recientemente en Hansel y Gretel.
En el cine hemos visto toda clase de vampiros, desde los terroríficos a los románticos crepusculares de nueva hornada, y en el caso de Byzantium, sus vampiros podrían estar incluidos en el subgénero del folletín decimonónico.
El guión de Moira Buffini nos presenta a Eleanor y Clara, dos vampiras que en su eterna huida de unos misteriosos perseguidores, se establecerán en el hotel de una pequeña ciudad de la zona costera. Una vez allí, veremos como Clara comienza a gestionar un prostíbulo reclutando a las prostítutas de la zona, mientras intenta pasar desapercibida y no llamar la atención sobre su naturaleza vampírica. Por su parte Eleanor, atrapada en una eterna angustia adolescente, intenta desvelar su naturaleza al mundo, atormentada por la culpa. Todo cambiará cuando conozca a Frank, un joven con el que Eleanor entabla una amistad imposible, que sacará a la luz la tumultuosa relación entre las dos mujeres.
La historia va avanzando intermitentemente en dos líneas temporales, la del presente, y la del pasado, sin duda la más interesante, en la que se nos va narrando el tenebroso y enigmático origen de las dos vampiras.
Las dos actrices protagonistas no están del todo mal, brillando un poco más la señorita Arterton, que tiene oportunidad de utilizar varios registros. Saoirse Ronan en cambio da la impresión de que siempre está interpretando el mismo papel de películas anteriores, y es que hay escenas de Byzantium en las que aparece la actriz que podrían haber aparecido en Hanna sin el más mínimo problema.
En definitiva, Byzantium es una película que se deja ver con cierto interés, que presenta alguna que otra novedad en el mito vampírico, pero que acaba lastrada debido a sus casi dos horas de duración. La película no acaba de ser del todo redonda, siendo bastante anodina y previsible en las escenas que transcurren en el tiempo actual, aunque afortunadamente va ganando en fuerza e intensidad en las escenas en las que se nos muestra el pasado de los personajes y donde da la impresión de que el director se encuentra mucho más cómodo con esa historia que nos está contando.

30 de septiembre de 2013

Cleaner (Renny Harlin, 2007)

El otro día me dio por acordarme de Renny Harlin, ese director de origen finlandés que tan de moda estuvo durante los noventa y que los aficionados al cine de acción recordarán por películas de acción como Máximo Riesgo o La Jungla de Cristal 2, que fueron todo un éxito en su día. Tras un vistazo rápido a su filmografía me percaté de que aún tengo varios títulos suyos por descubrir, así que me he preparado una especie de mini-ciclo en el que iré recuperando títulos que en su día dejé pasar como La Isla de las Cabezas Cortadas o Memoria Letal, o como en el caso de Cleaner, que es la que reseñaré hoy, que ni siquiera conocía su existencia. Algo imperdonable por mi parte, ya que la película merece bastante la pena.
La cinta está protagonizada por un Samuel L. Jackson que durante esos años alternaba películas bastante olvidables como 1408 o El último asalto con otras algo más interesantes como Black Snake Moan o la divertida e inclasificable Serpientes en el avión. Con este papel de padre y ex-policía atormentado, Samuel L. Jackson logra una gran y comedida interpretación demostrando que es un actor que no solo puede funcionar en papeles secundarios, si no que es capaz de llevar todo el peso interpretativo de una película.
Cleaner cuenta la historia de Tom Cutler, un ex-policía que tras dejar el cuerpo debido a un traumático suceso que cambió su vida, decidió crear una empresa dedicada a limpiar las habitaciones donde se han producido muertes o asesinatos, una vez que la policía ha abandonado la escena del crimen. Todo cambiará en la vida de Tom cuando recibe el encargo de limpiar una escena del crimen antes de la llegada de la policía, convirtiéndose así en involuntario encubridor de un crimen. De este modo Tom, pedirá ayuda a Eddie Lorenzo, interpretado por el siempre competente Ed Harris, un antiguo compañero del cuerpo para que le ayude a intentar atrapar al verdadero asesino que le tendió la trampa que le incrimina como autor del asesinato.
Completan el reparto Eva Mendes, que interpreta a la viuda de la víctima, y Luis Guzmán, un actor secundario por el que tengo especial simpatía y que no suele defraudar en sus numerosas apariciones fílmicas.
En definitiva, Cleaner es un más que recomendable thriller con algunas licencias al cine de género negro más clásico, con el que el director finlandés demuestra que no solo domina la acción, sino que es capaz de encargarse de otros géneros, dando aquí toda una lección de como se debe rodar de manera sobria y contenida una entretenida película de suspense.

29 de septiembre de 2013

After Earth (M. Night Shyamalan, 2013)

Tras el mal sabor de boca que Airbender, el último guerrero dejó tanto en la crítica como en el público, se esperaba con cierta curiosidad y expectación After Earth, la que hasta la fecha es la última cinta del director de origen indio. Varias razones hicieron que el hype creciera desmesuradamente entre el fandom, una de ellas fue contar en las tareas de dirección con M. Night Shyamalan, un autor del que aún se esperan cosas buenas, otra de las razones es que era una historia de ciencia ficción futurista, y la última de las razones es que Will Smith, junto a su hijo Jaden, protagonizarían el film, con la que la película se beneficiaría del estatus y del éxito de la megaestrella en Hollywood.
La película nos cuenta como los seres humanos se han visto forzados a abandonar la Tierra debido a constantes catástrofes naturales que hicieron la vida impracticable, por lo que la humanidad buscó otro planeta para establecerse convirtiéndose Nova Prime en su nuevo hogar. Tras presentarnos a los personajes, y ponernos en situación, veremos como el comandante Cypher Raige, interpretado por Will Smith, parte en una misión en compañía de su hijo Kitai, interpretado por su propio hijo Jaden, cuando su nave espacial atraviesa una tormenta de asteroides, la nave se avería y se hace pedazos estrellándose finalmente contra un planeta que resulta ser la misma Tierra. Una Tierra que, sin la presencia de los seres humanos, ha llegado a evolucionar a un paraje salvaje e inhóspito para cualquier ser vivo. Como era de esperar, y más sabiendo que la película está escrita y producida por Will Smith para lucimiento exclusivo de su hijo Jaden, los únicos dos supervivientes del accidente son Cypher y Kitai, siendo este último el encargado de recorrer el planeta y localizar una de las partes destrozadas de la nave para poder activar una baliza de salvamento con la que pedir ayuda para ser rescatados.
Si exceptuamos varias escenas de acción, tampoco demasiado espectaculares, no sabemos si debido a la incapacidad interpretativa de Jaden Smith o a la dejadez del director al tratarse de una película de acción de encargo, la ligerísima trama de videojuego que va avanzando a golpe de "ir pasando pantallas" nos presenta la típica película de supervivencia, en la que el único conflicto emocional que encontramos sea el de la distante relación entre padre e hijo. Una relación enquistada debido a un hecho traumático ocurrido hace unos años, que Shyamalan, fiel a su estilo, nos va mostrando gradualmente a través de recurrentes flashbacks que iremos viendo según va avanzando la historia. Quizás sea en estos momentos donde más se pueda reconocer la particular impronta del director de películas como El Sexto Sentido o El Protegido.
Lamentablemente After Earth ha terminado siendo una de las grandes decepciones de este verano repleto de blockbusters. Un producto que a priori contaba con unos ingredientes que podrían haber atraído a los espectadores en masa a los cines y haberla convertido en todo un éxito,  pero que sin embargo, debido a las razones ya mencionadas y a otras que se me escapan, nos ha dado como resultado un film anodino, aburrido y previsible. Añadan a la ecuación a un joven e inexperto actor, cuyo nulo carisma provoca el rechazo del posible espectador que se acercara buscando una película de aventuras y ciencia ficción entretenida que, siendo sinceros, quizá contaba con unas expectativas demasiado altas.

28 de septiembre de 2013

A Haunted House (Mike Tiddes, 2013)

He de comenzar esta reseña confesando que no me considero demasiado fan de la saga Paranormal Activity, de las que solo he podido ver las dos primeras partes que no acabaron de convencerme demasiado, pareciéndome interesante su primera parte y directamente aburrida la segunda.
Por otro lado me encanta el humor de los hermanos Wayans, siendo Scary Movie una de mis spoofs preferidas, de modo que me intrigaba lo que Marlon Wayans podría haber pergeñado en esta cinta que parodia la famosa saga de películas de found footage creada por Oren Peli.
Antes de ver A Haunted House se recomienda al menos repasar la primera película de Paranormal Activity para conocer un poco las situaciones que se parodian en esta película y disfrutar mucho más de los chistes que propone el guión firmado por Wayans.
Narrada al estilo found footage, la cinta comienza con Malcolm, interpretado por el propio Marlon Wayans, probando su nueva cámara de vídeo con la que documentará su nueva vida en pareja junto a su novia Kisha, que acaba de mudarse a su casa. La convivencia en pareja no será como ambos esperaban y todo se complica cuando un fantasma se instala en la casa dando lugar a situaciones de lo más divertidas.
En el reparto encontramos nombres habituales como David Koechner, Dave Sheridan, Nick Swardson, Andrew Daly, Cedric the Entertainer y J.B. Smoove, grandes actores secundarios de lo mejor que se puede ver en la nueva comedia norteamericana.
Dirigida por Mike Tiddes, la película es una sucesión de sketches en los que veremos un variado repertorio de chistes de todo tipo que van desde lo racista a lo escatológico.
A Haunted House es una comedia gamberra y divertida, que puede no llegar a agradar a todo el mundo debido a algunos chistes de mal gusto, pero que gustará especialmente a los fans del humor de los hermanos Wayans.

27 de septiembre de 2013

Behind The Candelabra (Steven Soderbergh, 2013)

Varios amigos me recomendaron insistentemente que viera Behind The Candelabra debido al excelente trabajo actoral de Michael Douglas, así que me puse a ello con cierta cautela ya que apenas conocía a Liberace, y tampoco es que me llamara demasiado la atención el personaje sabiendo que era un telefilm para televisión producido por el canal norteamericano HBO, pero como me encantan los biopics, siempre y cuando estén bien hechos, decidí darle una oportunidad.
Una vez terminada la película he de confesar que no me arrepiento en absoluto de haberla visto, ya que la historia me enganchó desde el primer minuto gracias a unos personajes magníficamente interpretados tanto por el ya mencionado Douglas, que da vida a Liberace, como Matt Damon que interpreta a Scott Thorson, su joven amante, que un tiempo después de romper su relación con el famoso artista publicaría el polémico libro Behind The Candelabra: My Life with Liberace, en el que se basa esta película.
Además de los mencionados actores, la película cuenta con un reparto estelar con nombres como Dan Aykroyd, Debbie Reynolds, Scott Bakula o Rob Lowe, en un divertido papel.
Otro de los aspectos que llama poderosamente la atención en Behind The Candelabra es el espectacular diseño de producción que recrea con brillantez la época en la que Liberace estaba en lo más alto de su carrera, y donde es palpable que los 23 millones de dólares de presupuesto han sido excelentemente aprovechados por la HBO para dotar a la película de un acabado capaz de competir con las grandes super producciones hollywoodienses. Como era de esperar, la inversión se ha visto recompensada y como hemos visto en la reciente entrega de los Emmy Awards a la que acudía como una de las grandes favoritas con 15 nominaciones, y de los cuales consiguió tres: Mejor Telefilm, Dirección y Actor para Michael Douglas, que realiza una interpretación excepcional.
Steven Soderbergh también se llevó su Emmy, y muy merecidamente añadiría, rodando con mucho oficio y con muy buen gusto esta entretenida historia que mantiene al espectador hipnotizado ante la pantalla en todo momento gracias al brillo que desprenden los dos actores protagonistas, que están realmente soberbios y que nos dejan momentos tan sorprendentes como el vuelo en el escenario de Douglas o la enfermiza transformación física de Damon, que se quedarán en el retina de los espectadores.
He de confesar que Steven Soderbergh no ha sido nunca santo de mi devoción, y que no llego a conectar con la mayoría de sus films anteriores, y sin embargo con Behind The Candelabra ha sabido ganarse todo mi respeto y mi atención para los proyectos que vaya desarrollando en el futuro, si es que no acaba retirándose del mundo del cine definitivamente, como llegó a anunciar hace un tiempo.
Si continúa rodando películas tan entretenidas y recomendables como ésta, por mí que siga dirigiendo durante muchos años más.

26 de septiembre de 2013

2 Guns (Baltasar Kormákur, 2013)

Durante la proyección de 2 Guns tuve la agradable sensación de retroceder en el tiempo hasta los ochenta, aquella maravillosa década en la que las denominadas buddy movies dominaban las carteleras de todo el mundo con el único objetivo de entretener al personal y de paso reventar las taquillas de los cines a base de tiros, explosiones y muchos chistes. Esa misma sensación la tuve recientemente al revisionar Tango & Cash, una de las películas que mejor definiría el concepto de buddy movie, y con la que 2 Guns tiene más de un punto en común, y que además ha servido para descubrirme a Baltasar Kormákur, director de origen islandés al que no tenía el gusto de conocer hasta este film, con el que ha despertado mi curiosidad por su trabajo y que ha hecho que me interese por algunos de sus films anteriores, como por ejemplo Contraband, que me dispondré a ver en cuanto acabe esta reseña.
2 Guns está basada en el cómic homónimo de BOOM! Studios obra de Steven Grant, un guionista veterano adscrito al género negro, y del dibujante Mateus Santolouco, cómic publicado recientemente por Norma Editorial, y que aún no he tenido la oportunidad de leer, pero que si he podido ojear dándome la impresión, no sé si equivocada o no, de que la película es bastante fiel al material original que adapta.
La película comienza con dos atracadores Bobby y Stig, interpretados por Denzel Washington y Mark Whalberg, preparándose para atracar un banco de un pequeño pueblo, y hacerse con el dinero de un capo de la mafia mejicana. A continuación gracias a un flashback la acción nos traslada a unos días antes del atraco e iremos averiguando quienes son realmente los personajes protagonistas, todo un acierto por parte del director que no te desvela todas sus cartas, dando a pie a que el espectador pueda sorprenderse según va avanzando la trama.
No quiero desvelaros muchos más detalles del argumento sin estropearos algunos momentos que, sin duda, merecen la pena ser vistos sin información previa de ningún tipo, por lo que yo os recomendaría que os abstengáis de ver trailers o de leer sinopsis de ningún tipo para que podáis disfrutar plenamente de 2 Guns. Un film de lo más entretenido al más puro estilo buddy movie, y me aventuraría a decir que de lo mejor que hemos podido ver en las pantallas últimamente en cuanto acción pura y dura, con un ritmo frenético, unos diálogos muy divertidos, y una excepcional pareja de actores protagonistas con una gran química entre ellos y es que tanto el Oscarizado Washington como Walhberg, al que hemos podido disfrutar recientemente en la gran Dolor y Dinero, están enormes y dan todo un recital en los momentos en los que ambos actores comparten en pantalla.
Acomapañan a estos dos monstruos de la interpretación, unos secundarios de auténtico lujo como Edward James Olmos, James Marsden, Fred Ward, la bellísima Paula Patton y el inconmensurable Bill Paxton, al que echábamos muchísimo de menos y que aquí compone un personaje de esos que se recuerdan durante meses.
Resumiendo 2 Guns es una entretenidísima película de acción con dos protagonistas carismáticos, repleta de tiros y explosiones, aderezada con golpes de humor, y que no defraudará a aquellos que busquen en la cartelera un cine de acción honesto, realizado con la única y sana intención de entretener al espectador sin tratarle como a un descerebrado.

Marvel's Agents of S.H.I.E.L.D. (Piloto, 2013)

Atención: El texto que van a leer a continuación ha sido escrito por un lector de cómics Marvel desde su más tierna infancia, por lo que quizá la reseña no sea del todo objetiva XD.

Con muchísimas ganas esperaba el estreno de la serie Marvel's Agents of S.H.I.E.L.D., por un lado por ser una serie creada por Joss Whedon, al que tengo en alta estima por sus productos televisivos como Buffy y Angel, entre otras series, y por otro lado por ser una serie que pertenece al Universo Marvel cinematográfico y que sería la continuación directa de Los Vengadores, la película de superhéroes definitiva hasta la fecha, que también fue dirigida por Whedon.
La serie comienza, como no podía ser de otro modo, haciendo referencia a la Batalla de Nueva York, que pudimos ver en la mencionada Los Vengadores y a los seres superpoderosos que participaron en ella, con lo que está claro que van a querer exprimir el tirón de la exitosa película todo lo que puedan, y los aficionados al universo cinematográfico de Marvel bien que nos alegramos por ello.
Escrito y dirigido por el propio Whedon, al que acompañan en labores de escritura su hermano Jed y su cuñada Maurissa Tancharoen Whedon, este piloto nos presenta a un nuevo equipo de S.H.I.E.L.D. liderado por un revivido Phil Coulson (Clark Gregg), que se moverá al margen de la organización, y que se dedicará a investigar y localizar a nuevos seres con poderes que han comenzado a aparecer por todo el mundo tras la Batalla de Nueva York. Para lograr su objetivo veremos como Coulson irá reclutando a nuevos miembros para su equipo, todos ellos personajes creados ex profeso para la serie y que no han aparecido nunca en cómics Marvel.
Los efectos especiales son modestos pero funcionan, los diálogos son ingeniosos al estilo Whedon, y las referencias a los cómics Marvel son abundantes, con cameo de Maria Hill incluido, por lo que los fans del Universo Marvel disfrutarán de lo lindo viendo este primer episodio, de una serie que a priori tiene toda la pinta de ser un procedimental en toda regla y que de momento, y aún viendo solo este piloto, puede ser todo un éxito a poco que dejen a Whedon y a su gente trabajar con cierto margen para desarrollar la serie sin cortapisas y podamos llegar a ver algo parecido a lo que vimos en su día en el Buffyverso.
En definitiva, un piloto con ritmo y muy entretenido, que deja con ganas de más y que nos invita a seguir esta nueva serie con cierto interés y con el entusiasmo de ese niño que espera con impaciencia a que lleguen al kiosko los cómics del mes para saber como continúan las aventuras de sus personajes favoritos.

25 de septiembre de 2013

Admission (Paul Weitz, 2013)

Admission nos cuenta la historia de Portia Nathan, interpretada por Tina Fey (30 Rock), una de las responsables de tramitar las solicitudes de admisión en Princeton, una trabajadora ordenada y eficiente con una vida planeada hasta el milímetro, que verá su mundo vuelto del revés cuando aparecen en su vida un brillante joven con pobres calificaciones pero cuyo sueño es conseguir estudiar en la prestigiosa Universidad, y el maestro de éste Jonathan Pressman, interpretado por Paul Rudd (Si fuera fácil).
Atraído por el reclamo de su pareja protagonista, dos actores cómicos que me suelen gustar bastante y cuyos trabajos no me suelen defraudar, me acerqué con cierta cautela a esta película, una pseudo comedia romántica con tintes dramáticos que se queda a medio camino de los géneros citados no llegando a funcionar como comedia con unos escasos chistes torpemente ejecutados por parte del director a pesar de la buena voluntad puesta por Tina Fey, que no llega a explorar la parte dramática debido al tono ligero de la cinta y con unas escenas románticas que en lugar de emocionar dan bastante vergüenza ajena.
Los actores protagonistas no están del todo mal, pero a la Fey la hemos visto quizás demasiadas veces en papeles similares y ya no llega a sorprender, mientras Paul Rudd, por su parte pone empeño en evitar el histrionismo que ha demostrado en otras películas de corte más cómico y no lo hace del todo mal.
Completan el reparto varios actores secundarios del que cabe destacar la aparición de la siempre competente Lily Tomlin, en el papel de la madre de la protagonista que da algo de lustre a la cinta en las escenas que comparte con su hija.
En definitiva, una cinta anodina e insustancial que nos vuelve a contar una historia que hemos visto miles de veces, y en la que nada sorprende pudiendo llegar a aburrir en algunos momentos. La probada vis cómica de los dos actores protagonistas es echada a perder en esta cinta, no sabemos si por culpa del guión que tampoco da para más o si es por culpa del director, Paul Weitz, un realizador de filmografía irregular con varios títulos dirigidos a un público familiar, y cuyos títulos más conocidos quizá sean American Pie, la película que revitalizó las comedias juveniles gamberras, y Ahora los padres son ellos, la tercera parte de la trilogía de comedias protagonizada por Robert De Niro y Ben Stiller.
Ignoro si Admissión ha tenido o tendrá distribución por estos lares, pero personalmente no la recomendaría a esos cada vez más numerosos fans de la comedia romántica americana, que sé de buenta tinta que haberlos haylos.

Arrested Development (4 Temporada, 2013)

Paladeando el último episodio de la cuarta temporada de una de las mejores comedias que han podido disfrutar estos ojos, caí en la cuenta que había devorado sus quince episodios en apenas tres días. En mi descargo diré que Arrested Development es tremendamente adicitiva y que sus episodios suelen durar unos treinta minutos, por lo que el maratón ha sido corto pero extremadamente intenso, y sobre todo, muy, muy divertido.
Cancelada en su tercera temporada en 2006 por Fox alegando las bajas audiencias conseguidas, algo que no es de extrañar viniendo de una cadena a la que no le tiembla el pulso a la hora de cancelar series si los números no les cuadran, la serie creada por Mitchell Hurwitz regresó triunfalmente hace unos meses de la mano de la plataforma digital Netflix que permitía la posibilidad de ver esta nueva temporada a través de lo que se denomina internet bajo demanda.
Para mí, una de las mejores sit-coms de la historia de la televisión, Arrested Development, que puede recordarnos a la mítica Enredo, nos cuenta la historia de la familia Bluth, formada por unos miembros a cada cual más alocado y donde uno de sus miembros, Michael Bluth, acompañado por su hijo George Michael (sí, como el cantante de Wham!), interpretados por Jason Bateman y Michael Cera respectivamente, intentan mantener la normalidad y la compostura en esta alocada y disfuncional familia. Los demás miembros de la familia están interpretados por actores de sobra conocidos y con una vis cómica a prueba de bombas como George (Jeffrey Tambor), el cabeza de familia, su esposa Lucille (Jessica Walter), su subreprotegido y "especial" hijo menor Buster (Tony Hale), Gob (Will Arnett), el hermano mayor y mago de profesión, su hermana Lindsay (Portia de Rossi), unida en un matrimonio sin futuro al eterno aspirante a actor Tobias Fünke (David Cross), y la hija de estos, la ignorada Maeby (Alia Shawkat).
Disparatadas tramas, personajes secundarios estrafalarios, cameos de actores de renombre (Carl Weathers, Lizza Minnelli, Ben Stiller, Charlize Theron, etc), diálogos rápidos e ingeniosos, sucesión de chistes a cada cual más genial, actores cómicos hilarantes... todo esto y mucho más encontraréis en los 68 episodios de las cuatro temporadas disponibles hasta la fecha de esta divertida serie que a poco que os gusten las comedias bien escritas y mejor interpretadas se convertirá rapidamente en una de vuestras favoritas.
Como novedad, en esta cuarta temporada, sus responsables, han querido dedicar cada uno de los episodios a uno de los miembros de la familia que se convierte en protagonista absoluto, mientras nos van relatando que es lo que ha ocurrido con los demás miembros de la familia durante los años que han transcurrido desde el final de la tercera hasta esta cuarta temporada. Todo presentado en un genial y divertido puzzle plagado de continuos flashbacks y enredos que el espectador irá recomponiendo en su cabeza según van avanzando los episodios, y donde todas las historias de los personajes que se nos van narrando paralelamente, y en donde veremos episodios muy divertidos, otros excepcionalmente divertidos y otro extremadamente carcajeantes como por ejemplo los dedicados a Buster y a Tobias, confluirán en un gran y sorpresivo final con un cliffhanger de los que hacen época.
Ahora solo nos queda esperar a que la familia Bluth regrese, ya sea en una quinta temporada o que los rumores de una hipotética película se conviertan en realidad y podamos disfrutar en la gran pantalla de las andanzas y desventuras de estos alocados personajes.

23 de septiembre de 2013

Justin y la Espada del valor (Manuel Sicilia, 2013)

Antonio Banderas continúa apostando por el cine de animación español y tras El Lince Perdido vuelve a presentarnos como productor un nuevo producto de la factoría malagueña Kandor Graphics, Justin y la Espada del valor.
Esta aventura dirigida especialmente al público más infantil nos cuenta la historia del joven Justin, obligado a seguir los pasos de su padre y convertirse en abogado en un reino gobernado por burócratas donde, al igual que ocurriera en Star Wars con los Jedi, los caballeros han sido desterrados y prácticamente han desaparecido como orden.
Justin tiene un sueño, seguir los pasos de su abuelo el gran caballero Rolando y convertirse en uno de los míticos caballeros del valor. Y como suele ocurrir en cualquier película de aventuras nuestro protagonista se embarcará en una búsqueda, en este caso para encontrar la legendaria espada de su abuelo Rolando, en un viaje plagado de peligros que le cambiará por completo, y de este modo veremos como al finalizar la película, Justin ha logrado su sueño y alcanzado su destino.
Pero Justin no estará slo en su viaje, le acompañan la guapa y rebelde Talía, a la que presta su voz la actriz Inma Cuesta en la versión española, Sir Antoine, un pícaro mocetón con ínfulas de poder y riquezas al que presta su voz el propio Antonio Banderas, y el divertido Melquiades, un excéntrico hechicero con trastornos de personalidad evidentes, que a más de uno le recordará al televisivo y nunca olvidado Carlos Jesús, en un más que obvio "homenaje".
Entrenado por Blucher, Legantir, y Braulio, tres sabios monjes, antiguos caballeros retirados, Justin conseguirá su propósito no sin antes enfrentarse a una banda de malhechores liderada por Heraclio, un caballero rebelde que fue expulsado de la orden de los caballeros del valor y cuyo plan es derrocar a la Reina y hacerse con el control absoluto del Reino.
Como ya hemos dicho anteriormente, Justin es una agradable película de aventuras con referencias a los mitos artúricos, dirigida especialmente a un público infantil que disfrutará de lo lindo con algunos de los personajes que aparecen en la película, pero que quizá acaba olvidándose un poco del espectador adulto al que no hace concesiones prácticamente en ningún momento de la película, si exceptuamos algunos momentos puntuales y sobre todo las apariciones del personaje de Melquiades que pueden hacer reír al espectador talludito.
A su favor, hay que reconocer que tanto el diseño de personajes como la factura técnica de Justin y la Espada del valor son exquisitos, y en ese sentido la modesta Kandor Graphics puede competir sin complejos con las grandes factorías de animación 3D como Pixar o Dreamworks, aunque quizá deban mejorar en el aspecto de cuidar algo más la historia, los diálogos y la construcción de sus personajes, si además de entretener al niño que va a a ver la película, quieren cautivar a los padres que le acompañen al cine.
En definitiva, una película técnicamente irreprochable que podría haber dado más de sí, y que, sin duda, conseguirá acertar de pleno con el público infantil a la que va dirigida.

Asalto al poder (Roland Emmerich, 2013)

¿Alguien lleva la cuenta de las veces que Roland Emmerich ha destruído en sus películas La Casa Blanca? Pues sumen una más, amigos. Como ya habréis podido comprobar en los trailers, incluso en el cartel de la película, en Asalto al poder, (White House Down en su título original), Emmerich se da el gustazo y una vez más hace volar por los aires el hogar del Presidente de los Estados Unidos, todo un símbolo para los estadounidenses.
El alemán es uno de esos directores cuya filmografía ha sido casi siempre vapuleada por la crítica, pero sin embargo la mayor parte de sus producciones han sido apoyadas por el gran público que siempre responde de manera positivia y acude en masa a ver sus películas palomiteras con la única y sana intención de pasar un rato entretenido en la butaca del cine.
A la espera de la anunciada secuela de Independence Day, uno de los mayores éxitos del director, y tras la personal y entretenida Anonymous, llega esta cinta de acción con ligeros toques de comedia que hará las delicias de los amantes de los blockbusters veraniegos y sobre todo de las películas de acción noventeras, de las que Asalto al poder bebe bastante.
La historia nos cuenta como un grupo de mercenarios se hace con el control de La Casa Blanca con la intención de secuestrar al Presidente de Estados Unidos, con oscuras y aviesas intenciones que no quiero desvelar para que el disfrute del visionado del film sea completo. Pero claro, como ocurriera en la ya clásica Jungla de Cristal, los terroristas deberán vérselas con John Cale, un agente especial que pasaba por allí para una entrevista de trabajo y como ya le suceciera al bueno de John McClane, se encontraba en el momento y lugar equivocados y para colmo, acompañado de su hija.
Partiendo de un argumento tan delirante como divertido, Emmerich sabe perfectamente que teclas tocar para hacer disfrutar al espectador, sobre todo al estadounidense que gozará y sufrirá a partes iguales con algunas de las espectaculares escenas del film.
Channing Tatum, uno de los jóvenes valores del Hollywood actual, se nos presenta aquí como el McClane del Siglo XXI, y no lo hace del todo mal sabiendo conjugar de manera efectiva las escenas de acción con las escenas humorísticas, como ya hiciera en la imprescindible y divertida Infiltrados en clase.
Tatum contará con un inesperado compañero de fatigas, al más puro estilo de las buddy movies, ni más ni menos que James Sawyer, el Presidente de Estados Unidos, interpretado por el solvente Jamie Foxx, que lo mismo interpreta a un esclavo liberado en Django Desencadenado, como al villano Elektro (Arrives) que se enfrenta a Spider-man en la secuela de The Amazing Spider-man de próximo estreno, como a un "obamizado" presidente de los Estados Unidos.
Completan el reparto actores conocidos como Maggie Gyllenhaal, Jason Clarke, Richard Jenkins, destacando a dos por encima del resto: el veterano James Woods que está inmenso y la niña Joey King que da todo un recital y que pese al papel que interpreta de niña repelente sabelotodo no está para nada cargante.
Acción a raudales, espectaculares escenas de vuelos de helicópteros, peleas, tiroteos, villanos over the top, humor, guías turísticos desatados y mucho más encontraréis en esta entretenida película de Emmerich, un honesto director que sabe dar al público justo lo que pide, y que en ésta, su última película hasta la fecha, continúa haciendo el mismo tipo de cine palomitero con el que ha sabido conquistar la taquilla durante años, y cuyos únicos peros quizá sean su excesivo metraje y un final bastante vergonzante que a más de uno le puede provocar un inesperado subidón en el nivel de azúcar.

Tú eres el siguiente (Adam Wingard, 2011)

La algarabía y el entusiasmo de las opiniones de algunos tuiteros nos hacen pensar que Tú eres el siguiente, película que acaba de estrenarse en nuestro país, acabará convirtiéndose gracias al boca-oreja en una película de culto, y yo que me alegraría si eso ocurriese.
Pero qué encontrará el espectador que acuda al cine a ver Tú eres el siguiente. Si hacemos caso de los trailers y de la campaña de promoción, da la impresión de que nos encontramos ante una película de terror del subgénero slasher con un nuevo asesino con máscara al estilo del Jason de Viernes 13. Y nada más lejos de la realidad, ya que aunque Tú eres el siguiente coquetea con la atmósfera, el ritmo y los elementos típicos del slasher, en un momento de la cinta y con un giro de guión bastante inesperado comienza a caminar por otros derroteros y se convierte en algo totalmente diferente, una comedia negra salpicada con toques de humor cafre y gamberro y gore en cantidades industriales, que hará las delicias de ese público que busque algo nuevo y diferente dentro del ya tan manido género de terror.La película está dirigida por Adam Wingard y escrita por Simon Barrett, dos de los adalides del nuevo cine de terror contempóraneo, y responsables de algunos de los segmentos de las exitosas antologías de terror V/H/S y V/H/S/2, y suponemos que gracias al éxito de estas dos cintas, ve ahora la luz en España Tú eres el siguiente, una película anterior dentro de sus filmografías.
Con una conseguida atmósfera ochentera y un comienzo que es puro homenaje al género del slasher, la cinta cuenta como la adinerada familia Davison vuelve a reunirse en su casa de veraneo tras un tiempo separados, con motivo de una cena familiar en la que los padres conocerán a las parejas de sus hijos. La cena se complicará cuando la casa comienza a ser atacada por un misterioso asesino con el rostro cubierto por una máscara de un animal, y como suele pasar en estas ocasiones, descubrir más detalles de la trama sería entrar en el escabroso y siempre delicado terreno de los spoilers, así que no desvelaré más detalles de la trama para que podáis disfrutar al 100% de una película, que aunque no es del todo original en su planteamiento y desarrollo, si que cuenta con una resolución bastante original y que dejará al espectador, como suele decirse, con el culo torcido.
El reparto cuenta con varios rostros jóvenes y habituales de títulos independientes, entre los que destacan la joven de origen australiano Sharni Vinson, que es quizá la gran sorpresa de la película, a los que acompañan dos actores veteranos como son Rob Moran, un actor habitual del cine de los Hermanos Farrelly, y por supuesto la imponente Barbara Crampton por la que hay que reconocer que no pasan los años. A destacar el cameo de cierto director de culto amiguete de los responsables de la cinta en un papel bastante divertido. 
Y volvemos a repetir, una cosa es que te vendan la cinta como la película más terrorífica del año, algunos la comparan con la Scream de esta generación, y otra muy distinta es lo que te vas a encontrar en los 94 minutos de duración, que no es otra cosa que un homenaje al género slasher y al cine de terror ochentero bajo una mirada descreída y con un humor negrísimo donde las risas, por lo exagerado de algunas situaciones, están aseguradas.
Tú eres el siguiente no es la gran esperanza blanca del cine de terror de esta década, y no creo que fuera esa la intención de sus responsables al realizarla, y sin embargo es una muy disfrutable película para pasar un buen rato en el cine, una opción a tener en cuenta entre los estrenos de la semana.

Epic. El mundo secreto (Chris Wedge, 2013)

Estrenada en una semana en la que tuvo que competir con títulos tan potentes como Cazadores de Sombras, Dolor y Dinero o Kick-Ass 2, Epic: El mundo secreto, la nueva película de los Estudios Blue Sky (Ice Age y Rio), ha conseguido alzarse al primer puesto de la recaudación en la taquilla nacional de la semana pasada. ¿Tendrá algo que ver que es una película dirigida, en un principio, al público infantil, o puede ser por la potente campaña de marketing o quizás por que se haya estrenado el último fin de semana del mes de Agosto? Intentaremos desentrañar las razones del éxito en taquilla de Epic en esta breve reseña.
Dirigida por Chris Wedge, director de Ice Age y Robots, llega a las pantallas españolas Epic: El mundo secreto, una película que recoge las mejores esencias del cine de Ghibli y del estilo de las producciones Disney, para ofrecernos un producto que hemos visto una y otra vez, y que nos cuenta la historia de una joven adolescente con problemas de comunicación con su padre, que ve reducido su tamaño y se ve transportada a un mundo diminuto donde se verá envuelta en una guerra entre una sociedad regentada por la Reina Tara, que protege y conserva la vida en el bosque, y otra facción, los Boogans, comandada por el malvado Mandrake, cuya meta es destruir toda vida en el bosque. La historia inspirada en el libro infantil The Leaf Men and the Brave Good Bugs de William Joyce, que también participa como guionista de la cinta, nos deja con un regusto a ya visto, como hemos dicho anteriormente, pero no obstante sigue funcionando como un mecanismo de relojería y dejará satisfecho tanto al espectador infantil como al espectador adulto, ya que es una deliciosa película con un gran ritmo, muy entretenida, y con una factura técnica exquisita.
Además de todo lo mencionado, Epic ofrece al espectador unos muy buenos diálogos, chistes graciosos, personajes bien construidos que presentan conflictos entre ellos y en su versión original, la cinta cuenta para las voces con actores de auténtico lujo como Colin Farrell, Beyoncé Knowles, Chris O'Dowd, Amanda Seyfried, Christoph Waltz, Jason Sudeikis, entre otros y como curisosidad destacar la participación del cantante y rapero Pitbull prestando su voz a uno de los personajes.En definitiva, Epic: El mundo secreto se nos presenta como una excelente opción para disfrutar en companía de los más pequeños, pero que no dejamos de recomendar también a los talluditos amantes de la animación tradicional, ya que encontrarán en esta película varios elementos del cine de animación más clásico, con los que sin duda se lo pasarán como niños.

Dolor y Dinero (Michael Bay, 2013)

Acaba de estrenarse en nuestro país la última película dirigida por Michael Bay, conocido por blockbusters tan espectaculares y taquilleros como La Roca, Armageddon o la (hasta ahora) trilogía de Transformers, que a la espera del estreno el año que viene de una nueva entrega de la saga robótica, se ha dedicado a rodar Dolor y Dinero (Pain & Gain, 2013), una película modesta dentro de su filmografía y que casi podríamos clasificar como "cine de autor".
En Dolor y Dinero, Bay nos narra una truculenta historia sobre un secuestro basada en hechos reales. Historia que podría haber dado para un drama bastante trágico, y a la que Bay ha decidido imprimir un agradecido aire de comedia negra que aligera bastante el tono de algunas de las tropelías que cometen los personajes protagonistas en varios momentos del metraje de la cinta.
Los personajes son una pequeña banda formada por tres culturistas con pocas luces y mucha ambición liderados por Daniel Lugo, un personaje obsesionado con el estilo de vida que vende el "American Dream" y cuyos ídolos son los personajes fílmicos Rocky Balboa de Rocky, Michael Corleone de El Padrino y Tony Montana de El Precio del Poder, interpretado brillantemente por Mark Wahlberg, al que acompañan Paul Doyle, interpretado por Dwayne "The Rock" Johnson, que consolida con cada nueva película su estatus en el Olimpo de super estrellas hollywoodiense; y Adrian Doorbal interpretado por el actor Anthony Mackie, al que veremos encarnando al Halcón en la inminente Capitán América: El Soldado de Invierno.
El guión firmado por Christopher Markus y Stephen McFeelyde nos presenta a unos personajes de dudosa catadura moral a los que podríamos calificar de patéticos perdedores, que sin embargo acaban ganándose el cariño del espectador en esta divertida cinta en la que Bay se nos transforma en un hiperactivo y acelerado imitador de cintas como Fargo, si a los hermanos Coen les hubiese dado por dirigir bajo los efectos de sustancias estimulantes.
Completan el reparto el inmenso Tony Shalhoub que da vida al rico empresario al que secuestran los personajes protagonistas, y que es uno de los aspectos más destacables de la película, y por supuesto no nos podíamos olvidar de Ed Harris, actor que ya había trabajado con Bay en La Roca y al que aquí regala uno de esos papeles secundarios que son auténticos caramelos para actores veteranos como Harris.
Aquellos espectadores que acudan al cine a ver Dolor y Dinero se encontrarán con una hilarante comedia negrísima, bastante cafre y salvaje por momentos, con la que el director californiano nos muestra una afilada y nada sutil crítica a ese tan ansiado e inalcanzable Sueño Americano, que si se toma demasiado en serio, como acaban haciendo los protagonistas de esta historia, puede acabar convirtiéndose en una obsesión y en una terrible pesadilla.
Resulta perturbador el modo en que Bay consigue hacer reír al espectador con una historia tan terrible que no lo olvidemos está basada en hechos reales, por eso el director no dejará de recordarnos en todo momento que todas las situaciones salvajes y surrealistas que aparecen en pantalla y con los que el espectador se está carcajeando de lo lindo, sucedieron del mismo o similar modo, y es que como se suele decir, la realidad por increíble y absurda que parezca supera en muchas ocasiones a la ficción.
Merece destacar la acertada elección de los temas que componen la banda sonora, todo un viaje nostálgico a la década de los noventa.
Termino esta breve reseña confesando que nunca he conseguido comulgar con la filmografía de Bay, y tampoco nunca he sido demasiado fan de sus blockbusters, pero reconozco que con esta cinta el director me ha conquistado y espero y deseo que en sus próximos proyectos tenga sitio para otros proyectos más personales y "modestos" alejados de blockbusters y franquicias, como esta extremadamente divertida y recomendable Dolor y Dinero que se ha convertido, sin lugar a dudas, en una de las comedias del año.

11 de agosto de 2013

Elysium (Neill Blomkamp, 2013)

Los aficionados al cine de género le debemos mucho a Peter Jackson, y no solo por su faceta como cineasta que siempre ha estado ligada al género fantástico de una manera u otra, si no también por su importancia como fundador de la companía de efectos especiales Weta Digital, o también por su labor como productor en la película Distrito 9 (2009) con la que descubriríamos al director debutante de origen sudafricano Neill Blomkamp. Es justo señalar que a pesar de venir avalada por Jackson, Distrito 9 fue una cinta de ciencia-ficción que contando con un presupuesto de unos 30 millones de dólares, acabaría cosechando un éxito inusitado convirtiéndose de la noche a la mañana y gracias al boca-oreja en una película que gustó tanto a crítica como a público y acabaría superando los 200 millones de dólares de recaudación.
El éxito de Distrito 9, colocaría a Blomkamp en el punto de mira de las grandes productoras, siendo Sony Pictures quien contrató finalmente al director para su próximo proyecto que acabaría siendo una nueva historia de ciencia-ficción titulada Elysium.
En Elysium, Blomkamp que hace doblete como escritor y director, nos relata una nueva historia de ciencia-ficción distópica, en la que en un futuro cercano la Tierra se ha ido arruinando hasta convertirse en un planeta donde la miseria y la superpoblación han forzado la construcción de la estación espacial en órbita Elysium, habitada por ricos y poderosos que han conseguido huir de las penalidades del planeta Tierra y donde viven con todo tipo de lujos y comodidades en contraposición a los habitantes que se han quedado en la Tierra.
El versátil actor Matt Damon interpreta a Max DaCosta, un tipo corriente que ha conseguido dejar atrás una vida de delincuencia e intenta ganarse la vida como buenamente puede en una fábrica de robots de la Corporación Armadyne.
Todo se complica cuando la vida de Max está en juego y éste intente por todos los medios entrar en Elysium, lo que la Secretaria Delacourt, la encargada de la defensa de la estación espacial, interpretada por Jodie Foster, deberá evitar a cualquier precio, ya que la irrupción de cualquier inmigrante ilegal procedente de la Tierra amenazaría la forma de vida lujosa y opulenta de los habitantes de la estación espacial.
Mención especial merece la participación del también sudafricano Sharlto Copley, actor fetiche del director con el que ya trabajara en su anterior film, que demuestra que es un actor fuera de serie interpretando a Kruger, un personaje "over the top" que se come la pantalla en cada una de sus intervenciones.
A la nada disimulada crítica a nuestra sociedad actual en la que la desigualdad entre ricos y pobres va aumentando progresivamente, siendo más evidente cada día que pasa, el espectador que se acerque al cine a ver Elysium encontrará además una historia de acción, al más puro estilo de los blockbusters de esta época estival, repleta de espectaculares escenas de acción magníficamente rodadas, y unos excepcionales efectos especiales donde destacan especialmente los movimientos de los robots que aparecen en el film.
Lamentablemente, y a pesar de ser un genial creador de mundos distópicos, Blomkamp con su guión nos deja con la sensación de que la historia que nos está contando la hemos visto ya cientos de veces, y esta pierde bastante fuelle sobre todo en la parte final donde la trama cae en lo convencional y todo sucede de forma algo atropellada.
Para aquellos que tengan pensado ir a ver esta película, háganse un favor, y no se les ocurra ver ninguno de los trailers de la misma.
En definitiva, Elysium es una película que no defraudará a aquellos que disfrutaron con la anterior cinta del director sudafricano, pero que puede llegar a decepcionar a aquellos espectadores que busquen algo más en su segundo largometraje.

10 de agosto de 2013

Guerra Mundial Z (Marc Forster, 2013)

Llega a las carteleras españolas la esperada adaptación de la aclamada novela Guerra Mundial Z del escritor Max Brooks, reputado novelista y además hijo del actor y director Mel Brooks.
Producida por Plan B Entertainment, propiedad de Brad Pitt, Guerra Mundial Z nos presenta al ya veterano actor como principal reclamo de este esperado blockbuster. Atrás quedan los innumerables problemas que tuvo que atravesar el proyecto durante su preproducción, producción y post-producción, sin embargo sus responsables han conseguido llegar a buen puerto la cinta, y el resultado, quizás no ha sido tan redondo como se esperaba, pero aún así el espectador encontrará en la pantalla un blockbuster veraniego de lo más digno y una película con un ritmo vibrante y trepidante que no deja un respiro al espectador en ningún momento de las casi dos horas que dura la película.
Muchos aficionados al género zombie se han preguntado cuales son los puntos en común entre la novela y la película, y es que aparte del título no hay ninguno más y este hecho ha encencido las iras de los fans de la novela. Y es que quizá el principal problema al que se hayan tenido que enfrentar los guionistas de esta producción entre los que encontramos nombres ya reconocidos del género como Matthew Michael Carnahan, Drew Goddard, Damon Lindelof y el guionista de series de televisión y cómics J. Michael Straczynski, haya sido la estructura episódica de la novela y el hecho de contar la historia a base de testimonios de los supervivientes a la denominada Guerra Mundial Z. Esta estructura fragmentada y de protagonismo coral tan característico de la novela hubiese sido perfecta para otro formato como por ejemplo una serie de televisión, pero quizá no hubiese sido una decisión afortunada el emplearlo para un blockbuster veraniego protagonizado por Brad Pitt, por ello los guionistas han decidido cortar por lo sano y en lugar de adaptar la novela han optado por narrar lo que podríamos denominar como el origen de la epidemia y de los ataques zombies, y como Gerry Lane, un investigador de las Naciones Unidas, interpretado por Brad Pitt deberá abandonar a su familia y viajar por todo el mundo en busca del origen de la infección con el fin de poder sintetizar una vacuna con la que acabar con la pandemia que asola el mundo.
Acompañan a Pitt, actores televisivos de sobrada solvencia como Mireille Enos (The Killing), James Badge Dale (Rubicon), Peter Capaldi (The Thick of It) o Matthew Fox (Lost), al que este último yo no recuerdo haber visto en la película aunque aparezca acreditado en el reparto. ¿Eliminado en la sala de montaje quizás?
La cinta dirigida por Marc Forster, director con una filmografía tan ecléctica con títulos como "007: Quantum of Solace", "Más extraño que la ficción", "Descubriendo Nunca Jamás" o "Monster´s Ball", ha sabido ponerse al servicio de la espectacularidad y de la acción trepidante en esta producción y ha conseguido rodar una serie de escenas espectaculares que se van sucediendo una tras otra, sin apenas dejar respiro, y que mantienen al espectador en tensión durante todo el metraje.
En definitiva, Guerra Mundial Z quizá no guste a los fans más acérrimos de la novela, ya que poco o nada tiene que ver con ella aparte del título, pero aún así se presenta como una película muy entretenida que gustará a los que vayan a verla con la idea de que van a ver otra película de zombies, en la que estos se presentan como una especie de veloz marabunta con mente colmena que va arrasando todo a su paso. La película deja con ganas de ver en acción a más zetas, y sobre todo más enfrentamientos alrededor del mundo entre los "zetas" y los humanos a los que es probable que veamos en próximas secuelas si la cinta funciona bien en taquilla, ya que como bien reza el título de la película es una Guerra Mundial, y aún quedan muchos enfrentamientos e historias alrededor del mundo que contar durante el apocalipsis zombie.

29 de junio de 2013

Star Trek: En la Oscuridad (J. J. Abrams, 2013)

J. J. Abrams, director a cargo de la exitosa revitalización de Star Trek, una franquicia que estaba muerta y enterrada desde hace años, regresa a la gran pantalla el próximo día 5 de Julio con la secuela de la brillante Star Trek (2009).
En la segunda entrega del reboot de esta franquicia multimillonaria, cuya primera entrega supo contentar por partes iguales a los más acérrimos trekkies seguidores de la serie clásica, como al gran público que llena las salas de cine, que vio satisfechas sus expectativas con una vibrante y entretenida cinta que supuso el despegue definitivo de la, en otros tiempos, popular franquicia que andaba de capa caída desde hace varios años hasta que gracias al buen hacer del equipo responsable de la primera parte, con Abrams a la cabeza, regresa ahora para narrarnos más aventuras de la tripulación de la nave interestelar Enterprise.
La cinta arranca de manera espectacular y trepidante, muy al estilo de las películas de Bond, con la historia ya empezada que invita al espectador a meterse en la película desde el primer minuto. A continuación veremos como, lo que en un principio podría ser una mera anécdota, se convierte en el desencadenante de una trama que articulará los 132 minutos de metraje de este espectacular blockbuster veraniego.
Y volviendo de nuevo a Bond, la trama recuerda en varios pasajes a Skyfall, del que los guionistas Roberto Orci, Alex Kurtzman y Damon Lindelof han tomado buena nota al crear al interesante villano de este film, auténtico protagonista de la historia, y que incluso ha ganado el protagonismo en los carteles frente a cualquier otro miembro de la tripulación del Enterprise, nos referimos, claro, al actor Benedict Cumberbatch, el Sherlock televisivo que demuestra de nuevo su buen hacer interpretativo robando protagonismo en las escenas que comparte con los actores protagonistas.
El trío de guionistas, famoso por su trabajo en series como Lost, rescatan para esta nueva aventura del Enterprise una historia de venganza, que bebe bastante de una de las películas de la saga clásica con la tripulación original. Una historia que aún siendo bastante previsible, sigue guardando algunos giros de guión que sorprenderán al espectador en esta entretenida historia en la que veremos como un Kirk soberbio y arrogante aprenderá una lección que le hará madurar y por fin le hará ganarse los galones de capitán de la Enterprise, y donde Abrams deja cerrada su participación, para embarcarse en una nueva aventura interestelar a los mandos de la franquicia de Star Wars, dejando la cerada por Gene Roddenberry lista para nuevas historias a cargo de otro director y de otros guionistas.
Es digno de mención que los guionistas de En la Oscuridad hayan intentando desarrollar un poco más a los personajes, y las relaciones entre ellos, sin embargo no consiguen salir airosos en algún que otro caso, y algunos personajes, digamos secundarios, aparecen en la película porque son parte de la tripulación y no porque su participación en la trama sea determinante. Lo único destacable es quizá la aparición de un nuevo personaje femenino en la tripulación, interpretado por la bellísima Alice Eve, que protagoniza el momento más sexy y, también el más gratuito, del film.
Como era de suponer en una producción del presupuesto manejado, la factura técnica es exquisita y las escenas de naves y de efectos especiales son espectaculares, como ya lo fueron en la primera entrega, y la dirección de Abrams es vibrante y enérgica, sin dar un momento de respiro al espectador, y quizá el único pero que se le podría achacar es el excesivo e injustificado uso de la denominada técnica Lens flare o los brillitos, como yo los llamo, que están más que presentes en cada uno de los planos de la película.
En definitiva, esta nueva entrega de Star Trek quizá abuse algo de ese tonillo "oscuro y realista", al que en Hollywood está impregnando los últimos blockbusters que llegan a nuestras pantallas, pero no obstante sigue poseyendo esos golpes de humor que hicieron de la primera entrega una película tan divertida y entretenida. Por lo tanto, si os gustó la anterior no puedo dejar de recomendaros esta segunda parte en la que encontraréis más de lo mismo, con el añadido de un villano misterioso y carismático que roba escenas en cada plano del film.

16 de junio de 2013

The Trip (Michael Winterbottom, 2010)

Han tenido que pasar tres largos años, pero por fin ha llegado a nuestras carteleras la película The Trip.
Dirigida por el inglés Michael Winterbottom, director de una filmografía tan interesante como ecléctica, que nos ha hecho disfrutar de films tan dispares como 24 Hour Party People, Código 46, Wonderland o El demonio bajo la piel, por nombras unas pocas.
La premisa de The Trip es la siguiente, a Steve Coogan el diario The Observer le financia un viaje gastronómico por los mejores restaurantes de todo el país. El actor había planeado hacer este viaje en companía de su novia, pero esta ha decidido abandonarle y Coogan decide no echar a perder este viaje y llama a uno de sus amigos para que le acompañe por este viaje en el que ambos gozarán de la cocina e intentarán hacerlo de su mutua companía.En esta película narrada a modo de falso documental seguiremos el viaje de Coogan, actor fetiche del director, que en esta ocasión se interpreta a si mismo, acompañado de su amigo Rob Brydon, cómico galés que trabaja en la radio con un gran talento como imitador de actores y personajes famosos.
Al estilo de esas road movies vistas mil y una veces, tenemos la típica historia de dos personajes que no se llevan bien, pero se toleran, y que están destinados a entenderse durante el viaje resolviendo las mismas al final del mismo.
Un consejo: es obligatorio ver esta película en versión original, porque las imitaciones que hacen de varios actores los personajes no tendrán ningún sentido con actores de doblaje españoles, y son sin duda las partes más divertidas de la película.
No es una comedia al uso, quizás podríamos considerarla como una "dramedia", pero si que tiene pasajes bastante divertidos, sobre todo los protagonizados por Brydon. Una película bastante recomendable con una fotografía espectacular, que te muestra unos parajes realmente preciosos y que gustará a todos aquellos amantes de la denominada Nueva Cocina, que sin duda disfrutarán del copioso desfile de platos de diseño que aparecen durante los 107 minutos de metraje.

13 de junio de 2013

Trance (Danny Boyle, 2013)

Desde que descubriera Trainspotting en 1996 he seguido con mucho interés la carrera cinematográfica de Danny Boyle, uno de los directores más interesantes del panorama actual. Su filmografía destaca por intentar contar historias diferentes en cada nueva película y no encasillarse en un único género, por eso durante su carrera podemos encontrar películas tan distintas como La Playa, Sunshine, 28 días después, Slumdog Millionaire o 127 horas, por poner unos ejemplos.
Tras sorprenderme en la dirección de la estupenda 127 horas, esperaba con muchas ganas Trance, su más reciente película hasta la fecha, que llega a las carteleras españolas mañana viernes 14 de junio.
Con un reparto de auténtico lujo, Boyle nos presenta un interesante triángulo formado por los actores James McAvoy, Vincent Cassel y Rosario Dawson. Un reparto internacional que destaca en este thriller psicológico en el que los personajes brillan con luz propia sobre la ligera trama que Boyle nos presenta y que podríamos de definir como pequeño McGuffin con el que se desencadenará el conflicto entre los tres personajes.
Resulta bastante complicado comentar algo sobre esta película sin desvelar detalles de una trama en la que los giros de guión se van sucediendo uno tras otro, así que me ahorraré el narrar la sinopsis del film. Solo comentaré que lo que en un principio parece que va a ser una película sobre el espectacular y calculado robo de un cuadro acaba convirtiéndose en una película de personajes en los que la violencia, la amnesia y la hipnosis son los auténticos motores de una trama que se va desarrollando con varios e inesperados golpes de guión que sin duda sorprenderán al espectador más desprevenido.
El trabajo actoral es sobresaliente y en los hombros de los tres actores protagonistas se sustenta el armazón en el que Boyle construye una película muy recomendable para todos aquellos que acudan al cine y quieran ver una historia diferente a lo que podemos encontrar actualmente en la cartelera. Boyle nos presenta una historia con múltiples giros de guión, que contiene algunas pinceladas que nos pueden recordar a Origen de Christopher Nolan.
Las hipnóticas (y nunca mejor dicho) escenas oníricas repletas de bellísimas imágenes concebidas por el genial ojo del director de fotografía Anthony Dod Mantle y gracias también a una excelente banda sonora que casa perfectamente con las estimulantes imágenes mostradas en la gran pantalla por Danny Boyle, hacen de este film una de las películas más sugerentes del director británico del que esperamos con muchas ganas Porno, su próximo proyecto adaptando otra novela de Irvine Welsh, de la que ya adaptó en su día la inolvidable Trainspotting.

6 de mayo de 2013

Stoker (Park Wan-Chook, 2013)

El próximo viernes 10 de Mayo se estrena en los cines españoles Stoker, la última cinta rodada, hasta la fecha, por el director surcoreano Park Wan-Chook. Un director que llamó la atención de la crítica occidental con las películas que conforman la llamada "Trilogía de la venganza" (Sympathy for Mr. Vengeance, Sympathy for Lady Vengeance y sobre todo por su obra más aclamada, Old Boy, de la que está a punto de estrenarse un remake americano a cargo del director Spike Lee). Soy un cyborg y Thirst fueron sus últimas cintas rodadas en su país natal, antes de sucumbir a los cantos de sirena de Hollywood y filmar, avalado por la productora de los hermanos Ridley y el recientemente fallecido Tony Scott, Stoker, el debut de la que esperamos sea una larga y fructífera carrera en los Estados Unidos.
Para esta su primera aventura en Hollywood, Park Wan-Chook ha contado con un reparto de auténtico lujo, en el que encontramos a la joven actriz Mia Wasikowska (Alicia de Tim Burton), a la superestrella Nicole Kidman, que parece que ha dejado atrás sus escarceos con el botox y su rostro vuelve a recordarnos al de un ser humano, y por supuesto el tercer vértice de este triángulo está interpretado por el actor Matthew Goode (Watchmen).
Para aquellos que hayan visto el trailer de este film, y hayan relacionado el título con alguna especie de trama vampírica, lo sentimos por ellos, ya que puede que se sientan algo decepcionados con la película, ya que nada tiene que ver con las criaturas con las que ya tratara el director surcoreano en su anterior película Thirst.
Tras el fallecimiento de su padre (interpretado por Delmot Mulroney), la joven India Stoker (Wasikowska) y su madre Evelyn (Kidman) reciben la visita de su joven tío Charles (Goode). Ambas caerán rendidas ante los encantos y el misterio que rodea al hermano de su fallecido padre y marido.
De esta manera el complicado y retorcido triángulo entre los tres personajes está servido, y acarreará terribles y fatales consecuencias para todas aquellas personas que se acercan a dicho triángulo con intención de romperlo.
Siendo una película de personajes hay que destacar la labor de los tres actores protagonistas, así como la breve participación de Mulroney, que está francamente bien, y también a las dos actrices veteranas Phyllis Somerville y Jacki Weaver, ambas con breves pero sin embargo destacables actuaciones.
Con el guión firmado por Wentworth Miller, que se estrena como guionista, y al que los aficionados recordarán por la serie Prison Break en la que interpretó a Michael Scofield, Park Wan-Chook nos construye un trhiller terriblemente atractivo por su propuesta visual, pero al que poca chicha se le puede sacar con una historia que en ocasiones nos puede recordar a esos telefilmes que Antena 3 se empeña en emitir una y otra vez en las sobremesas de los fines de semana.
Es muy probable que en manos de otro director menos dotado para evocar poderosas imágenes como lo está el director surcoreano, esta película hubiera pasado por las carteleras sin pena ni gloria, por eso es de recibo destacar la labor del director de Old Boy que, con los mimbres con los que contaba, ha conseguido confeccionar un esmerado thriller psicológico repleto de bellas imágenes que permanecerán en la memoria del espectador muchos días después de abandonar la sala de cine.

6 de abril de 2013

Posesión Infernal (Evil Dead) (Fede Alvarez, 2013)

Acompañada de una brutal pero eficaz campaña de marketing, se estrena en las pantallas de todo el mundo el esperado remake del Evil Dead de Sam Raimi.
Esta nueva reimaginación del film de culto de 1981, viene avalada por el propio Raimi, que junto al mítico Bruce Campbell y a Robert G. Tapert han producido el debut en la dirección de largometrajes del uruguayo Fede Alvarez, que hace unos años deslumbró al mundo con Ataque de Pánico!, corto que consiguió abrirle las puertas de Hollywood.
Fede Alvarez, Rodo Sayagues y la oscarizada Diablo Cody, son los responsables del guión, y han tomado la historia original de Raimi, han cogido elementos de las dos primeras partes de la trilogía Evil Dead, y han ido añadiendo y modificando algunos elementos a esta nueva historia, para integrarla en la corriente del cine de terror del siglo XXI en el que, por supuesto, no se escatima con las escenas en las que hay abundancia de gore y de litros y más litros de sangre.
Mucho más bruta y excesiva que la original, esta nueva versión no se corta un pelo a la hora de mostrar aquellas escenas que allá en los ochenta Raimi dejara a la imaginación del espectador, y es que no nos engañemos, pero en estos tiempos es difícil asombrar al espectador actual que ya ha visto de todo en el cine de terror.
La historia nos cuenta como Mia, interpretada por la joven actriz Jane Levy, protagonista de la comedia televisiva Suburgatory, viaja junto a su hermano y varios amigos de la infancia a la vieja cabaña familiar para intentar dejar atrás, con la ayuda de sus amigos más cercanos, una parte de su vida que la está consumiendo.
Pero para aquellos que ya conocen la historia original, ya sabrán de lo que los personajes descubren en el sótano de la cabaña, un objeto que despertará algo maligno que habita en el bosque.
El resto del reparto entre los que encontramos entre otros a Shiloh Fernandez ( Caperucita Roja ¿A quién tienes miedo? ), Lou Taylor Pucci (Infectados) o Jessica Lucas (Monstruoso) son rostros jóvenes, que han hecho sus pinitos en series de televisión y en varias cintas de género, y cuyos rostros son menos reconocibles que el de la protagonista, pero a buen seguro poco a poco, y sobre todo gracias a esta cinta pronto sus nombres comenzarán a sonar en el star system hollywoodiense.
Como ya he comentado un poco más arriba, Alvarez no hace concesiones al espectador y además de realizar un sentido homenaje a la obra de Raimi, y aún echando de menos algunos toques de ese humor negro y socarrón tan característico de las películas de Raimi, no se autocensura a la hora de dar al espectador aquello que busca en una película de terror, y de este modo los que vayan al cine a disfrutar de este más que digno remake, se encontrarán con una jugosa y excesiva sucesión de sustos, gore y escenas escalofriantes que quedarán para siempre en la memoria del espectador.
En definitiva, nos encontramos ante una entretenida cinta de terror, una modesta producción de 17 millones de dólares que a buen seguro será todo un éxito de taquilla y de la que ya se ha confirmado su secuela, y en la que, en su hora y media de metraje, ya sea gracias a los temas compuestos por el español Roque Baños que consiguen crear una perfecta y terrorífica atmósfera, y a los eficaces y artesanales efectos especiales, los sustos están más que asegurados en este remake que, lejos de contarnos igual otra vez la misma historia plano a plano, elige su propio camino y nos da otra versión diferente, y a su vez fiel al original de Sam Raimi. Una película que contentará tanto a los que conozcan la película original de 1981, como a los nuevos espectadores que no hayan oído hablar nunca de la película de culto original y solo conozcan al director por su reciente Oz, un mundo de fantasía.
Y por supuesto aquellos espectadores que esperen hasta el final de los créditos, verán su paciencia recompensada con una escena final que hará las delicias de los aficionados a la saga de Raimi.

27 de marzo de 2013

G. I. Joe: La Venganza (Jon M. Chu, 2013)

Han tenido que pasar cuatro años, y varios retrasos en su fecha definitiva de estreno, para que por fin llegue a nuestras carteleras la esperada secuela de G. I. Joe (Stephen Sommers, 2009). Una cinta que en su día entretuvo bastante a los espectadores, funcionó bien en taquilla y que consiguió añadir un gran número de aficionados a la causa de los Joe, que se unieron a los veteranos seguidores de las figuras de acción creadas por la empresa juguetera Hasbro, también productora de esta nueva cinta, y por supuesto a los fans de los cómics y de la inolvidable serie de animación de los ochenta.
Todo un universo que en la primera parte cobraba vida de la mano del realizador de las exitosas dos primeras partes de la trilogía de La Momia, y que no dejaba de ser una película palomitera sin pretensiones que para nada se tomaba en serio en ningún momento.
La secuela, que se estrena hoy en cines de toda España, titulada G. I. Joe: La Venganza (G. I. Joe: Reataliation) nos llega como continuación directa de la primera parte, pero rompe prácticamente con todo lo que vimos en la primera cinta. Mientras que el equipo G. I. Joe que vimos en la anterior parte, era un equipo internacional de luchadores por la libertad dependiente de la OTAN, en esta segunda entrega se nos presenta como una fuerza especial de élite del ejército americano.
Otra ruptura con la primera parte la encontramos en el reparto, solo dos actores repiten papel, Channing Tatum sigue interpretando a Duke, y Ray Park al silencioso y enigmático Snake Eyes, mientras vemos como nuevos Joes que no habíamos visto en la primer parte pasan al primer plano de la acción, entre ellos Roadblock (Dwayne Johnson), Flint (D.J. Cotrona), Lady Jaye (Adrianne Palicki) y Jinx (Elodie Yung).
En el bando de los villanos solo continúa Byung-hun Lee como el ninja Storm Shadow, mientras que Joseph Gordon-Levit es sustituido por Luke Bracey como Comandante Cobra y debuta el macarra Firefly interpretado por Ray Stevenson (Punisher: War Zone).
Los guionistas de la cinta, Rhett Reese y Paul Wernick (Bienvenidos a Zombieland), obvian las explicaciones sobre que ha pasado con los demás Joes o que es lo que pasó con ciertos personajes cuyo final no estaba muy claro en la primera parte y desechan de buenas a primeras la participación en la cinta de Destro con una única frase en el guión.
Por lo demás, ambos guionistas firman una historia que continúa con una de las tramas argumentales de la anterior, incluyendo numerosos momentos de humor, en los que destaca el veterano e inconmensurable Jonathan Pryce, que hace suyos algunos de los momentos más divertidos de la cinta.
Jon M. Chu, cuyos antecedentes no auguraban nada nuevo, no lo hace del todo mal, dirigiendo con cierto brío y claridad las escenas de acción, y nos deleita con varias secuencias espectaculares, entre los que destaca, sin duda, el enfrentamiento aéreo en las alturas entre Snake Eyes y Jinx y varios ninjas de Cobra, con unas peligrosas montañas nevadas de fondo.
También me gustaría destacar la emocionante secuencia en la cárcel de máxima seguridad alemana en la que aparece un actor por el que siento debilidad y que últimamente está ganándose el premio a secundario de oro en las últimas producciones que están llegando a nuestras pantallas. Y no, no es Bruce Willis, y tampoco diré su nombre para mantener el misterio para aquellos que vayan al cine a verla.
Por otro lado aquel que busque caracterización de personajes en esta cinta, mejor que no se acerque al cine, porque aquí solo encontrará acción, acción y más acción. Básicamente lo que ya nos dio la primera parte, pero aún contando con diez millones de dólares más de presupuesto, se vislumbra cierta tacañería a la hora de mostrar al espectador la espectacularidad de la que hiciera gala su antecesora. ¿Se habrá invertido ese dinero en la conversión al 3D o en la contratación de una estrella de Bruce Willis como reclamo publicitario?
Y hablando del mítico John McClane, es una verdadera lástima que Bruce Willis, que interpreta al General Joe Colton, el Joe original, y que últimamente no gana para disgustos tras los palos que está recibiendo la quinta entrega de Die Hard, no pueda lucirse más en esta cinta en la que apenas tiene un par de momentos y cuya presencia no es determinante en ningún momento para el desenlace de la trama, quedando eclipsado en todo momento por Dwayne Johnson que se come la pantalla en cada una de sus apariciones. Esperemos que Willis recupere su estatus de action hero en la muy esperada secuela de Red que llegará próximamente a nuestras pantallas.
Resumiendo, los aficionados de toda la vida a los G. I. Joe, aquellos que se conocen los nombres, vida y milagros de todas las figuras de acción con las que jugaron de pequeños, disfrutarán como niños con zapatos nuevos, con esta entretenida secuela en la que gozarán de lo lindo viendo al Comandante Cobra con su casco de toda la vida y varios vehículos con los que sin duda jugaron de pequeños, y cuya adaptación fílmica esperemos tenga continuación, ya que según parece aún no hemos visto el fin de la malévola organización terrorista Cobra.

17 de enero de 2013

Django Desencadenado (Quentin Tarantino, 2013)

Con cinco nominaciones a los Oscar, entre ellas dos categorías tan importantes como Mejor película y Mejor Guión Original, y con dos flamantes Globos de Oro en su haber, el otorgado a Christoph Waltz como Mejor actor de reparto (también nominado para los Oscar) y el de Mejor guión original, mañana llega a los cines de toda España Django Desencadenado, el esperado último trabajo del cineasta Quentin Tarantino.
Han sido tres años de larga espera pero tras disfrutar como un enano de los 165 minutos de la última película del director de Pulp Fiction, solo puedo decir que las expectativas no se han visto defraudadas y que la espera ha merecido muchísimo la pena.
Tras abordar en Malditos Bastardos un género como el bélico, tan alejado del noir de sus propuestas iniciales, Quentin Tarantino ha querido probar fortuna con el western y para ello ha sabido extraer de sus múltiples y variadas referencias cinéfilas los ingredientes para este explosivo cóctel que además de estar aderezado por una potente y heterogénea banda sonora, toma prestados la canción original y por supuesto el nombre del personaje del spaghetti western Django, dirigida en 1966 por Sergio Corbucci y protagonizada por Franco Nero.
Y no señores, Django Desencadenado no es un remake, es otra cosa muy diferente, es una experiencia cinematográfica sin igual que a pesar de su larga duración, apenas se me hizo pesada y que ha conseguido quitarme el regustillo agridulce que en su día me dejaron sus Bastardos.
La historia nos traslada a un par de años antes de la Guerra Civil y nos presenta al cazarrecompensas Dr. King Schulz, sin duda uno de los personajes más carismáticos que han salido nunca de la pluma de Tarantino, interpretado magistralmente por Christoph Waltz, que tomará bajo su protección al esclavo recién liberado Django, interpretado por Jamie Foxx, para que le ayude en la busca y captura de unos bandidos a los que pretende dar caza.
A partir de ahí la historia se convierte en un western "de los de toda la vida" con la personal visión Tarantiniana, en el que no faltan grandes dosis de humor, y donde ambos personajes compartirán un viaje que les llevará en pos de la esposa de Django que también fue vendida como esclava a un terrateniente sureño llamado Calvin Candie, interpretado por un Leonardo DiCaprio que está enorme componiendo a este peculiar personaje francófilo.
Completan el reparto Samuel L. Jackson, que está inmenso interpretando al esclavo "Tío Tom" Stephen, que injustamente no ha recibido otra nominación al Oscar como mejor actor de reparto, junto a la de su compañero Waltz, el televisivo Walton Goggins, y varios cameos que no nombraremos para no desvelar la sorpresa a los espectadores.
En Django, Tarantino se ha permitido homenajear a los grandes directores del género y nos muestra esos bellísimos planos de los personajes cabalgando en espacios abiertos tan característicos del género. Estando ambientada en el Sur, el director trata el siempre peliagudo tema del racismo con su habitual sentido del humor en un par de escenas de lo más divertidas de la película, y sobre todo, y como no podía ser de otra manera, cuando la violencia, la sangre y los tiros hacen acto de presencia en la pantalla el espectador debe rendirse ante las poderosas imágenes propuestas por el director y dejarse llevar por la acción desenfrenada. 
Quizá los únicos peros que se les pueda poner a esta excelente cinta sean el poco protagonismo de un Jaime Foxx totalmente eclipsado por su compañero de fatigas de origen alemán, ese pequeña vuelta de tuerca al final que que a más de uno dejará algo descolocado y puede también que algunos, no será mi caso, se quejen de la excesiva duración de la película.
En definitiva, Django Desencadenado es una muy recomendable película con las dosis justas de acción, comedia y drama, que nos muestra la madurez de un director que dejó atrás hace muchos años los calificativos de joven promesa y enfant terrible para convertirse en toda una realidad, que muy fiel a su estilo ha sabido ganarse un lugar en el panteón de los grandes de Hollywood.